“Todo el mundo que compre en la Argentina tiene el recargo. Estamos en una política totalmente contraria a lo que se hace en todo el mundo, donde apuntan a tener más turismo emisivo y más receptivo”, explicó Chervatín en diálogo con radio Mitre.

Según detalló el especialista, esta semana mantuvieron una reunión con funcionarios de la AFIP que explicaron cómo será la operatoria a partir de los anuncios del pasado lunes. En el caso de los extranjeros, deberán presentar un número de CUIT utilizado en su país de origen para luego poder tramitar la devolución en su país.

Además, los agentes obligados a realizar la transacción serán aquellos que realicen la venta final de los productos, quienes deberán entregar una factura “provisoria” a los clientes hasta tanto la AFIP entregue los certificados que deberán utilizarse.

“Esto muestra la improvisación con que se determinó esto. No se puede sacar una medida a las 8 de la mañana para que se empiece a aplicar a las 9 cuando abren las agencias. Por lo menos nos tendrían que haber dado una semana de adecuación”, se quejó el empresario.

El lunes la AFIP anunció una “política fiscal” por la cual todas las personas que compren paquetes turísticos o pasajes deberán abonar un recargo de 20%, ya sea con tarjetas de crédito o en efectivo. Según explicó Ricardo Echegaray, la medida busca que los contribuyentes realicen “una exteriorización de patrimonio” y descartó que se trate de un nuevo impuesto.

A la par, el organismo recaudador subió de 15% a 20% la percepción anticipada impositiva para aquellos gastos realizados en el extranjero con tarjeta de crédito o de débito.