El impacto de bolsillo para los consumidores que tendrá el aumento de las tarifas eléctricas a partir del primer día de febrero, será superior al 18% que los analistas económicos están usando para calcular la incidencia en la inflación.

Un aumento del 18% es el que según el ente regulador (ENRE) tendrá el 90% de los usuarios residenciales de Capital Federal y Gran Buenos Aires, pero será del 28% para el 10% de los hogares, y un 15% para comercios.

Pero el cálculo no coincide exactamente con la realidad, porque se toma como base la factura media que pagan los residenciales durante todo el año, mientras en Capital Federal y GBA, con uso extendido del gas para calefacción en invierno, el consumo eléctrico es mucho más alto en verano por el gasto de los aparatos de aire acondicionado.

Dicho de otro modo, tendrán un 18% de aumento los hogares que utilicen hasta 400 kilovatios mensuales. Por encima de ese nivel, el alza será del 28%, y cuanto más elevadas resulten las temperaturas en febrero y marzo, mayor será la cantidad de hogares que sobrepasen el límite fijado.

Además, como el anterior aumento corre desde el 1 de diciembre el impacto de bolsillo es distinto según los vencimientos de los hogares. Los que recibieron las facturas con vencimiento a mediados de enero y lectura de medidor en los primeros días de ese mes, pagaron noviembre al precio anterior y diciembre con el aumento del 39% al 47%, pero en el último mes de 2017 la temperatura fue bastante benigna en varios de los días (de hecho la media fue casi un grado inferior a la de diciembre de 2016), por lo cual el uso de aire acondicionado disminuyó, como se advierte por la caída del 3% en la demanda de Capital y el conurbano.

Por tener solo un mes de aumento y un consumo menor al del año pasado, los hogares que pagaron la factura a mediados de este mes, todavía no sintieron a pleno el aumento de diciembre. Recién van a pagar totalmente el alza de ese mes, los que reciban la factura con lectura de medidor en los primeros días de febrero.

Por ese mismo motivo, a principios y mediados de abril, los hogares que corresponden a las distribuidoras Edenor y Edesur, estarán pagando totalmente los dos aumentos (el de diciembre y el de febrero), que significan teóricamente un 64% de incremento para el 90% de los casos, y del 88% para el resto.

A partir de este jueves, aumenta el precio mayorista de la energía en todo el país. Según lo que se sabe hasta ahora, ese valor pasará de $876 por megavatio/hora (o por 1000 kilovatios) en diciembre y enero, a $1.077. Esto significa un aumento del 22,9% en el mes próximo, que se adicionará a la suba del 36,8% aplicada en diciembre.

Según el subsecretario de Energía Eléctrica, Alejandro Sruoga, el aumento del precio mayorista de febrero tendrá un impacto del 13% en Córdoba, del 16% para Edelap, y del 15% en Tucumán.

En el caso de Edenor y Edesur, se suma el tercer aumento de la revisión tarifaria integral dispuesta para esas empresas, y el ajuste por los índices de inflación registrados en el semestre agosto- enero sobre los ingresos que perciben las dos distribuidoras.

Ese ajuste utiliza una fórmula que contempla precios al consumidor, construcción y salarios, y podría ser superior al estimado por el ENRE en noviembre pasado. Como consecuencia, puede haber todavía una resolución modificatoria o que la diferencia se adicione el 1 de marzo. Porque para esa fecha está previsto que Edenor y Edesur empiecen a cobrar a los usuarios en 48 cuotas mensuales, lo que perdieron de percibir por haber aceptado aplicar en tres etapas el aumento de la revisión tarifaria.