La Argentina y Brasil llevarán una posición común a la próxima reunión cumbre del G-20

La presidenta Cristina Fernández ponderó la participación Argentina en el Grupo de los 20 (G-20), y consideró muy importante a la nueva cumbre de mandatarios prevista para noviembre en Francia, donde se visualizará un panorama “más claro” de la actual crisis internacional y en la que Argentina “presentará” una posición común con Brasil.

“La idea es un poco también hablar con la compañera presidenta de la República Federativa de Brasil, Dilma Rousseff, para llevar una posición al G-20 acerca de cómo vemos la situación y de cómo deberían ser los instrumentos que deberían adoptarse a nivel global para poder paliar esta crisis”, dijo Cristina al referirse a la reunión que tendrá lugar en Cannes.

Sobre las recetas a aplicar y medidas para enfrentar la crisis, la Presidenta sostuvo que “somos un modelo que nos están mirando, porque lo que está pasando en el mundo se parece mucho a la Argentina del año 2001”.

“Así que -continuó, respondiendo a una pregunta sobre si la Argentina podría volver a los mercados el año próximo- vamos a ver cómo se desarrolla este mundo y nosotros en ese sentido hemos sido muy heterodoxos, hemos adoptado para cada caso, para cada situación instrumentos especiales, medidas especiales, muchas veces no entendidas, muchas veces incomprendidas”.

Al respecto, consideró que “también podrían ser temas que se tratarán cuando haya medidas -porque obviamente el Gobierno tiene la obligación, como tiene la responsabilidad de la administración y la gestión del gobierno- de proponer las medidas y en todo caso discutirse en el Congreso”.

La Presidenta invitó a otros sectores a aportar propuestas para crecer y resguardarse de la crisis, y proponerlas “explícitamente”, a la vez que llamó a hacerse cargo de las medidas.

En este sentido, subrayó que “no hay medidas neutras” en política económica, “normalmente alguien tiene que hacerse cargo de una parte de esas medidas y en Argentina siempre hemos tratado de que quien se tuviera que hacer cargo o por lo menos quien tuviera no digo que sufrir pero sí tener consecuencias, no sean precisamente los sectores más vulnerables”, dijo, marcando el horizonte de política económica que mantuvo el kirchnerismo desde sus inicios.

Agregó que este modo de ver la política económica “no solamente por una cuestión de sensibilidad social, que por supuesto la tenemos, sino por una comprensión de que uno de los principales problemas que hoy atraviesa la economía mundial es la inmensa contracción del gasto que han sufrido los sectores populares a lo largo y ancho del globo, producto de la apropiación de la renta y de la formidable concentración de la riqueza que ha habido en toda las economía desarrolladas”.

Cristina destacó el criterio de “contracción” que utilizó el economista Kenneth Rogoff en un reciente artículo, sobre la situación económica mundial, y quien no ve con malos ojos que bajo determinadas circunstancias algunos países pueden apelar a declarar un default o llevar adelante una reestructuración de deuda como lo hizo Argentina.

El especialista, que se desempeño tiempo atrás como economista jefe del FMI, también habló de la posibilidad de “licuar deuda con inflación”, entre otras recetas que se diferencian de las soluciones que aplica hoy la Unión Europea para salir de la crisis.

“Estamos viendo con mucha preocupación que las medidas que se proponen de ajuste van a tender a acentuar y a hacer todavía más gravitante esa contracción del gasto a los sectores vulnerables y por lo tanto van a hacer deprimir aún más la actividad económica”, sostuvo Cristina, sobre las soluciones que se proponen para los países europeos.

“Con diferencias, con matices -(el caso de Grecia)- es algo bastante parecido y es claro que Grecia no puede pagar 350 mil millones de euros, como la Argentina no podía pagar 160 mil millones de euros, así que en base a la más estricta realidad y atendiendo a cómo están las cosas es que vamos a ir tomando las medidas que tengamos que tomar como siempre lo hemos hecho”, agregó la jefa del Estado.

Por todo ello, consideró que “hablar del año que viene en este mundo de hoy es como hablar de dentro de dos siglos” al responder a una pregunta respecto a si piensa salir al mercado en 2012.

“Este año vamos a terminar de cancelar nuestras obligaciones con el método que hemos adoptado y que es con reservas del Banco Central, que nos ha permitido tener una solvencia muy importante para poder destinar recursos que serían afectados al pago de la deuda a la economía real, como han sido por ejemplo los créditos del Bicentenario, que han sido una importante inyección a la economía que nos han permitido crecer como hemos crecido”, dijo Cristina.

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