El gobernador de la provincia de Buenos Aires, Axel Kicillof, expresó hoy que el gobierno de María Eugenia Vidal “deja una caja de 25.000 millones de pesos”, y destacó que “el problema no es cuánto queda en la caja, sino las obligaciones que hay que atender”.

En su discurso ante la Asamblea Legislativa, Kicillof señaló que “esa cifra no alcanza para cumplir con las obligaciones de 30 días en la provincia”, y subrayó que “la cuenta da mal”.

Kicillof juró en el cargo ante la Legislatura y se comprometió “a trabajar sin descanso y con honestidad para reconstruir la provincia de Buenos Aires”.

“Hoy es para nosotros un dìa muy especial”, señaló junto a Verónica Magario, que asumió como vicegobernadora del distrito.

“Es el dìa en el que vengo a comprometerme a trabajar sin descanso y con honestidad para reconstruir la provincia de Buenos Aires”, afirmó.

“Es el primer día de una etapa diferente que fue abierta ayer por Alberto Fernández”, añadió, sobre la asunción del flamante Presidente que estuvo en La Plata junto a la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner.