Dentro de estos valores se estima que para la ciudad de Buenos Aires se darán mínimas entre 23 y 24 grados y máximas que llegarán a los 37 grados.

La difusora de turno, Silvia Gómez, precisó hoy a la agencia Télam que “continúa el alerta amarilla que se anunció ayer; esta ola de calor se estaría dando por las elevadas temperaturas reales y no tanto por la sensación térmica que no es muy alta porque tenemos poca humedad”.

El SMN emitió un informe especial en el que precisa que “la ola de calor continuará por lo menos hasta el jueves inclusive, con elevadas temperaturas que se van a registrar en la zona este y centro de todo el país, que van a fluctuar entre los 36 y 41 grados”, dijo la meteoróloga.

En este sentido, el SMN prevé para el viernes próximo un leve descenso de la marca máxima y precipitaciones hacia la tarde.

Gómez precisó que “estas temperaturas son normales para enero porque es el mes más cálido del verano, por eso estas olas de calor están dentro de los parámetros normales”.

Con respecto a la sensación térmica, la difusora aclaró que “en algunos lugares con elevado porcentaje de humedad, como puede ser en el litoral, la sensación térmica puede llegar a 45 grados”.

“Asimismo -continuó- como las temperaturas mínimas también van a ser elevadas, entre los 20 y 26 grados, hay que tomar precauciones porque el organismo humano no tiene descanso durante la noche y las casas no llegan a refrescarse”.

El alerta amarilla implica que la persistencia de las altas temperaturas pueden ser peligrosas, especialmente para los bebés y niños pequeños, personas mayores de 65 años o aquellos con enfermedades crónicas, por lo que se requiere tomar medidas preventivas.

Las recomendaciones del Ministerio de Salud de la Nación frente a este nivel de alerta son: tomar mucha agua durante todo el día, evitar las comidas abundantes, consumir alimentos frescos, como frutas y verduras, evitar las bebidas alcohólicas, muy dulces y las infusiones calientes.

Con respecto a la ropa, se recomienda usar vestimenta que no sea ajustada, telas livianas y colores claros.

Además, no es recomendable realizar ejercicios físicos en ambientes calurosos y tomar líquido antes de comenzar cualquier actividad al aire libre; protegerse del sol poniéndose un sombrero o usando una sombrilla, y utilizar cremas de protección solar.

Para los lactantes, a quienes sugieren darle el pecho con más frecuencia, y para los niños pequeños recomiendan hacerles beber agua fresca y segura, ducharlos o mojarles todo el cuerpo con agua fresca.

Asimismo, la cartera sanitaria recuerda que si una persona siente mareos o se desvanece, se debe acostar en un lugar fresco, bajo techo y se le debe dar una bebida rehidratante (nunca infusiones calientes ni muy dulces) y colocarle agua fría en las muñecas porque eso proporciona alivio.

Otros síntomas de alerta son el dolor de cabeza, la sensación de fatiga y la sed intensa, náuseas y vómitos, calambres musculares, convulsiones y sudoración importante que cesa repentinamente y somnolencia y respiración alterada.

Frente a estos síntomas es imprescindible concurrir rápidamente al médico en el centro de salud más cercano.