17 de octubre «Día de la Lealtad» un encuentro entre el pueblo y el líder.
El pueblo fue leal al líder y el líder no los defraudó.

«Vino con la mañana. Amanecía
era su ropa rota en la mañana
grito, lanza, bandera, luz campana.
Con él la nueva libertad nacía.(…)
Descamisado de mi pueblo. Cristo
de un mundo herido aunque no sé tu nombre
en una nueva Navidad te he visto»
José María Castiñeira de Dios

Nuestra historia está atravesada por ejes que han moldeado un perfil de ciudadanía que responde a los actos solidarios y a la demanda de sacrificio en determinados momentos difíciles.
Como recordamos, se venían gestando hechos sociales, políticos y económicos que sumergían a la clase trabajadora en una realidad de postergaciones. La aparición en la escena política del Coronel Juan Domingo Perón a cargo del Ministerio de Trabajo – le dio al país en ese momento – esperanzas de reivindicación desde una mirada profundamente humanista, cristiana y social. Ello hizo que el pueblo, reaccionase espontáneamente ante la detención y envío del Coronel Perón a la Isla Martín García.

Los trabajadores, hombres y mujeres intuyeron que algo importante e irrepetible estaba por pasar en Argentina y decidieron ser protagonistas. Recurrieron a un procedimiento social novedoso y de mucha contundencia: vinieron desde distintos lugares de nuestra Patria y se manifestaron pacíficamente en la histórica Plaza de Mayo reclamando por la libertad de quien con los hechos, había demostrado una preocupación e intención de dar al pueblo argentino justicia, derechos y dignidad. Es por ello que este constituye el primer movimiento social de masas populares, que «rescata» al Coronel Perón y logra que en la Argentina se viva el 17 de octubre como «un día inolvidable»: nació en esa fecha EL DÍA DE LA LEALTAD.

La Lealtad no es un bien que se compra sino que es un estado de valor moral de las personas, que contempla lo que siempre decimos: aquellas cuestiones éticas, solidarias, nobles y afines a los sentimientos. Lealtad significa ser fiel a las ideas, a los sueños y proyectos. Consideramos que es importante no producir ningún daño moral, sin egoísmos ni envidias. Fundamentalmente respetar a quienes desde otras ideas quieren expresarse en un estado de democracia y libertad; considerando los comportamientos asumidos y siendo coherentes con nuestra manera de pensar, de percibir la realidad cotidiana sin tentarnos con promesas sin fundamentos. Escuchar al otro, debatir, intercambiar opiniones es lo que fortalece a las democracias y fortalece también nuestra calidad de persona. Lealtad porque Perón siempre estuvo dispuesto al diálogo con el objetivo de sumar acciones que dieran como resultado la unión del pueblo argentino a través de la persuasión.

El carácter emblemático que tiene el 17 para los trabajadores, lo es para los peronistas y también para toda la clase obrera argentina, porque implicó su inserción como fuerte protagonista en el escenario político. A partir de entonces, los sindicatos se convirtieron en un «factor de poder» gravitante para la toma de decisiones. ¿Por qué el 17 de octubre es la respuesta del pueblo al mensaje de Perón del 10 de octubre? ¿Por qué la Plaza de Mayo del 17 fue la continuación del discurso de despedida del Secretario de Trabajo y Previsión, en la tarde del 10? Se verá poco tiempo después, una vez instalado en 1946 el gobierno constitucional, Eva Perón, acercó la solidaridad allí donde la ley todavía resultaba insuficiente. Creemos que por ahí debemos buscar una explicación acerca del 17 de octubre de 1945, en cuanto al significado que le asignamos, como punto de inflexión de nuestra historia.

En definitiva, el 17 de octubre es el Día de la Lealtad porque se produjo un entramado de unidad entre un hombre que despertó ilusiones y la gratitud de un pueblo que fue en busca de la esperanza. Ambos se complementaron para dejar en la historia el 17 de OCTUBRE como DÍA DE LA LEALTAD.

Desde esa fecha los cambios sociales fueron graduales pero contundentes, entre todos y soportando la resistencia de quienes no consideraban que los trabajadores teníamos derechos, se edificó un país donde, en la actualidad cada trabajador sabe que será recompensado con derechos: convenio colectivo de trabajo, un salario por su trabajo en blanco, con el aguinaldo, las vacaciones y recreación, la atención de la salud, derecho a la cultura y educación, a la posibilidad de turismo social, la atención a niños y a la ancianidad, derecho a la vivienda y la acción social para la cual Evita fue pilar para el futuro desarrollo del acontecer de nuestra Patria. En fin, una serie de conquistas para todo el pueblo que se fueron dando a partir de aquella jornada recuperando la dignidad de la persona en la participación social y política y, continuamos trabajando en ello.

Este día simbolizó el agradecimiento de la mayoría del pueblo trabajador argentino hacia quien se convertiría en su guía y líder, nos encaminó hacia la justicia Social y, esencialmente la consolidación del derecho al trabajo y al trabajador. Y, también fortaleció la producción y el pleno empleo para todos, atendiendo las necesidades sociales. Creo que debemos resaltar el concepto de Lealtad que muchas veces desde distintos sectores se trata de minimizar con el objetivo de que este pueblo tenga una lectura errónea de aquella histórica jornada. Esa gratitud mutua entre el pueblo y su líder hizo que se generase esta gesta histórica, por ello considero que al 17 de octubre podemos llamarlo Día de la Lealtad, de la solidaridad, la inclusión, la esperanza, de los ideales, los sueños y a los afectos.

Con fragmentos del Libro «17 de octubre: un día inolvidable» del mismo autor.