La Copa América despertó tensión entre dirigentes argentinos y uruguayos luego de que estos últimos hicieran público su malestar por haber recibido apenas el 10% de las entradas del estadio Monumental para la final del torneo, que el equipo de Oscar Tabárez disputará el domingo ante Paraguay.
“De las 5.700 entradas que nos dieron, 1.000 van para los jugadores, que las pidieron para su familia”, se quejó el presidente de la Asociación Uruguayade Fútbol (AUF), Sebastián Bauzá. De este modo, no queda ningún remanente de tickets.
La mayoría de los dirigentes del fútbol argentino participan del Comité Organizador de la Copa América, y son directamente responsables de que Uruguay solamente pueda contar con 6.000 entradas, explicó Bauzá a radio Carve.
Según consigna el diario El País, de Uruguay, esta situación atentaría contra el objetivo de que ambos países organicen en forma conjunta el Mundial 2030. Tal es así que el propio ministro de Turismo, Héctor Lescano, pidió ayer al presidente José Mujica que esté presente en la final del domingo e invitase a la presidente argentina, Cristina Kirchner, para ultimar detalles sobre la candidatura.
Finalmente, Mujica no viajará a Buenos Aires y en su lugar participará el canciller Luis Almagro. Del otro lado del Río de La Plata se leyó este gesto como un retroceso en el camino a 2030.