Los otros dos heridos son dos hermanos, de apellido Mora, uno de los cuales (identificado como Angel, de 27 años), fue herido de un balazo en el tórax pero tras un drenado está fuera de peligro en el departamento de cirugía. El otro, recibió un «roce de proyectil de arma de fuego en el muslo izquierdo, fue atendido y se retiró», dijo el director adjunto del Fiorito, Hugo Pardo a la prensa.
Según informó la policía, el ataque se produjo el domingo por la noche, alrededor de la 21.30, cuando entre ocho y diez hinchas de Independiente caminaban por la calle Gutenberg, entre Crisólogo Larralde y Lafuente, de la localidad de Piñeyro, cerca del la zona llamada «los siete puentes», a unas pocas cuadras del estadio tras el partido que el partido que Independiente empató 1 a 1 con Quilmes.
Un hombre permanecía detenido en la comisaría segunda sospechado de participar del ataque, el cual tenía dos versiones sobre su posible origen: la primera es que Loquillo y su gente fueron a exigir el dinero de los estacionamientos a dos «trapitos» que responderían al ex líder de la barra de Independiente y fue baleado junto a su gente. La otra versión da cuenta de que barras que responden a Rodríguez habrían atacado a un joven en la puerta de su casa y un familiar los baleó.
Loquillo fue el lugarteniente del antiguo líder de la barra (el que discutió con Cantero en la puerta de la sede ante las cámaras pero con una máscara de Frankestein) protegido durante la gestión de Julio Comparada, pero que cayó ante la llegada de Javier Cantero que le aplicó el derecho de admisión y terminó con los beneficios a los barras.
Rodríguez, distanciado del antiguo líder, también está en el grupo que tiene impedido el ingreso a la cancha por el derecho de admisión que pidió Cantero y puso en práctica el nuevo APreViDe. En Independiente aseguran que el antiguo líder, uno de los fundadores de Hinchadas Unidas Argentinas (HUA), se encuentra viviendo por estos días en Barcelona.
Loquillo pelea por seguir vivo en una sala de terapia intensiva del Fiorito y con la bala en su cuerpo ya que no pudo se extraída. Conforti explicó que la bala ingresó por la «axila izquierda» y comprometió «al pulmón y al corazón» y que el proyectil «sigue alojado» en el cuerpo.
El hospital se encuentra con una fuerte custodia policial por la causa judicial pero también ante temores de que el centro asistencial sea terreno de las internas de la barra, como ocurrió meses atrás en el hospital Santojanni cuando una facción de la barra de Nueva Chicago fue a ultimar a un miembro de un grupo antagónico tras un enfrentamiento que dejó dos muertos en el polideportivo del club.