Racing venció a Estudiantes y se quedó con el cuarto puesto
Con algunos suplentes debido a su inminente compromiso por la Copa Libertadores de América, Racing Club se impuso a Estudiantes de La Plata por 2 a 1, al cabo de un aceptable encuentro disputado esta noche en el estadio “Jorge Luis Hirschi”, en el marco de la vigésima tercera y última jornada de la Superliga.
Héctor Fértoli, a los 44 minutos del primer tiempo, inauguró el marcador para la “Academia”.
Ya en el complemento, Jonathan Cristaldo, a los 39, alargó la diferencia para el elenco de Sebastián Beccacece, en tanto que Nahuel Estévez, a los 43 minutos, descontó para el “Pincha”.
Racing logró un triunfo justificado en base a un mejor andar individual y colectivo, en desmedro de un dueño de casa en plena reconstrucción.
El remodelado reducto “Pincharrata” fue testigo de la asunción de Leandro Desábato en la dirección técnica del anfitrión.
Tras el inexpresivo ciclo de Gabriel Milito, el “Chavo” procuró inculcarle a sus jugadores la vieja mística de la institución, pero a juzgar por el comportamiento de sus dirigidos estos no captaron el mensaje.
Una “Academia” que siempre estuvo mejor parada, contó con rendimientos individuales superiores y un mejor trabajo de conjunto, seguramente forjado tras largas semanas de entrenamiento por su obsesivo orientador táctico.
Si bien el elenco “blanquiceleste” no dominó a voluntad, desde el vamos se le notó una línea de juego definida, a diferencia de un local al que le costó siempre una enormidad arribar al área del inadvertido arquero Gabriel Arias.
Producto de su mejor prestación y tras una enorme jugada individual del hábil Garré por derecha, resultó Fértoli el encargado de vulnerar a Andújar con un sutil toque corto.
El complemento mostró un masivo como improductivo adelantamiento estudiantil, siendo el tanto de Cristaldo tras una veloz corrida por izquierda y excelente definición, el que parecía darle un golpe de gracia a su oponente.
Empero, un aislado remate de Estévez sobre las postrimerías del cotejo le agregó emoción a los últimos minutos, con un Racing, que a contramano de su buena faena en casi todo el desarrollo, terminó pidiéndole la hora al árbitro Pitana.
Una eventual conquista “Pincha” solo se hubiera logrado justificar a partir de un arrebato anímico del cuadro de Desábato, a quien le espera una ardua tarea en su primera experiencia como entrenador de un equipo de primera división.
