Moris y el mendigo de Dock Sud

Escribe Antonio J. González.

“Creo que nosotros hicimos canciones, y las canciones tienen rango grande, o sea, llegan a mucho público, sobre todo al sentimiento de la gente, dudas miedos, alegrías. Yo sobre todo lo hice para eso, cuando hago una canción lo hago pensando en la gente…” así no se cansa de afirmar Mauricio Birabent, conocido en la música popular de hoy como “Moris”. Integró el grupo creador del conjunto “Baeatniks” y grabó varias decenas de discos desde el año 1970.

Después de ese año actuaba en el boliche “La Cueva”, escenario en donde actuaba lo más destacado del rock nacional: Tanguito, Los Gatos, Manal , Miguel Abuelo , Vox Dei , Billy Bond y Javier Martínez estaban allí.

Después vinieron los álbumes que circularon por los tocadiscos, boliches y escenarios del país y del exterior. En 1975 dejó el país porque se anunciaba un apocalipsis político y cultural. Recaló en España donde continuó su tarea de crear y difundir las canciones populares y recién 1981 vuelve al país con “Las obras de Moris”, un disco con ese repertorio. Luego se pregunta “¿Dónde están las canciones?”. y entrega “Sr. Rock presente”. Recién en 1995 conocemos “Sur y después”, y en 2005, lanza “Cintas secretas”.

La raíz popular, aquella consigna de “pensar en la gente” se vuelve materia musical. Así conocemos “El mendigo de Dock Sud” que descubre su raíz suburbana y popular.
“Yo soy el mendigo de Dock Sud, -canta- vivo debajo del puente hormigón y soy feliz./ Hoy el sol brilla, 15 de mayo,/ y yo sentado al final del Riachuelo / soy feliz. / Las palomas vuelan de fábrica en fábrica, / el río de aceite parece contento, / como el Mar Negro de mis libros de historia. / Yo conozco la historia del Dock Sud industrial, / yo fui obrero de la Shell. / Yo soy el mendigo del Dock Sud, uh-oh, / y conozco el fin del Riachuelo, / y la civilización. / Yo soy el mendigo del Dock Sud, / dónde está la nafta y el petróleo, / ahí están los ríos llenos de basura / volcándose hacia el mar. / El mar forma erizado caminos mágicos, / debajo del mar. / El mar no canta su canto, / hay cantares de mar. / Una mariposa blanca se ha posado más blanca, uh-oh…/ Yo soy el mendigo, sí, del Dock Sud,…”
“Estoy siguiendo mi camino…” agrega hoy, como afirmando una vez más sus raíces. Y allí está. Entero. “Con el sentimiento de la gente…”

ajgpaloma@gmail.com

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