“El proceso de recuperación del poder de policía del Estado Nación es un cambio estructural, revolucionario, a contrapelo del viejo capitalismo liberal hegemónico”, aseguró el funcionario.

Sbatella afirmó además que el organismo a su cargo “no actúa con discrecionalidad, sino con una matriz de riesgo que tiene parámetros objetivos, lo cual nos ha permitido resistir las denuncias penales”.

El funcionario lo expresó al participar junto a los titulares de la Sindicatura General de la Nación (SIGEN), Daniel Reposo, y del Instituto Nacional de Asociativismo y Economía Social (INAES), Patricio Griffin, en la inauguración de un seminario de actualización para cooperativas y mutuales.

Sbatella dijo que se pasó de una situación de 1.500 reportes de operaciones sospechosas en 2009 a unos 30.000 el año pasado, de todo el espectro de sujetos obligados, que incluye 25 categorías.

“Esa información se procesa sin sesgo político, ya que el 10% de los reportes que entra en rojo atraviesa un proceso interno de requerimientos, y luego del debido proceso se eleva a un fiscal, que es quien evalúa si se hace una denuncia o no. Estos son los pasos previos a una causa penal”, explicó.

El funcionario puntualizó que en los últimos cuatro años hubo 200 causas elevadas con prueba por la UIF, de las cuales sólo 25 fueron aceptadas por el fiscal.

Resaltó además que “todos los ciudadanos tienen derecho a que no venga un reporte y automáticamente se haga denuncia penal”, porque si no, “hoy tendríamos que tener 70.000 denuncias penales”.

“No podemos, porque a un periodista de rating se le ocurre, cargar los datos del ciudadano, cualquiera sea, porque se pierde toda posibilidad de defensa. No estamos a merced de los medios chantajistas”, aseguró Sbatella.

El titular de la UIF subrayó que la Argentina “es el primer país de América Latina que aplica la ley contra el financiamiento del terrorismo, y no contra los mapuches o el pueblo qom, como algunos anticipaban, sino que se hizo recaer contra los prófugos del terrorismo de Estado”.

“Congelamos los bienes al segundo jefe de la Armada y a 50 prófugos que tenían tarjetas de crédito y cuentas bancarias, de la misma manera que utilizamos la legislación anti lavado para allanar toda estructura económica y trabar embargos al grupo Ale en Tucumán”, ilustró Sbatella.

Añadió luego que “el proceso de recuperación del poder de policía del Estado Nación es un cambio estructural, revolucionario, a contrapelo del viejo capitalismo liberal hegemónico”.

“Estamos transgrediendo el orden global, con voluntad política, y eso nos lleva a hipótesis de conflicto que tienen que ver con este proceso”, añadió, para luego afirmar que “nos enorgullecen los 64 artículos, 12 editoriales y cinco tapas del diario `La Nación` contra la UIF, porque algo pasa para que salte esa oposición”.

Reposo resaltó a su turno que la Unidad de Información Financiera “tenga ahora una estructura acorde a las necesidades actuales del control y la problemática que ese organismo maneja”, en referencia al decreto que ayer aprobó su organización interna.

Agregó, sobre las críticas de la UIF, que “hay gente que apuesta a que les vaya mal a los funcionarios y a las instituciones, pero en realidad quieren que al país y a los argentinos les vaya mal”.

Reposo señaló que “contamos con decisión política para controlar en tiempo y forma, y también con recursos humanos profesionalizados, gracias a este tipo de capacitaciones que antes eran muy difícil que se realizaran en el Estado”.

“En la administración pública se comprendió que controlar mejora la eficiencia de la organización y esto hace que podamos hacer colectivamente una patria más justa”, concluyó.