En este contexto, y mientras cada vez más intendentes justicialistas alzan su voz en contra de esta medida, Vidal aún no se ha pronunciado al respecto. Pero sin dudas, esta medida fortalecerá su posición ante los jefes comunales, que en 2019 estarán urgidos por fondos frescos para sus municipios.

Por un lado, los intendentes bonaerenses de la oposición se mostraron contrariados ante esta medida, al entender que puede impactar de manera negativa en sus presupuestos. Además, empieza a tomar forma entre referentes de peso del justicialismo llevar este conflicto a una instancia judicial.

El Fondo está compuesto por el 30% de los montos recaudados en concepto de derechos de exportación de las exportaciones de granos de soja, harinas y aceites de soja, que son transferidos a las provincias, a los municipios. La provincia de Buenos Aires es la mayor beneficiaria, y en 2017 recibió unos 1.300 millones de pesos.

La oposición bonaerense se alineó en un repudio generalizado contra esta decisión. Walter Torchio, el jefe comunal de Carlos Casares, planteó que “si las retenciones siguen, ¿porque nos quitan a los municipios el Fondo?”. En tanto, el intendente de San Antonio de Areco, Francisco Durañona, criticó el carácter centralista de esta medida, que desde su perspectiva busca engrosar las arcas fiscales, en detrimento de las cuentas municipales.

El concejal de Pilar Santiago Laurent, del Frente Pilarense, señaló que “El presidente (Mauricio) Macri eliminó el Fondo Sojero, Pilar pierde 11 millones este año y más 40 millones para el año próximo. Lamentablemente vienen tiempos de un tremendo ajuste”.

Desde el Partido Justicialista de Buenos Aires advirtieron que la “eliminación arbitraria y abrupta” de estos fondos “representa un recorte de más de 570 millones de pesos, en una provincia que atraviesa gravísimos problemas en materia de educación, salud y seguridad”.

Felipe Sola, legislador nacional por el Frente Renovador, estimó que esta situación afecta las obras en provincias. “El presidente (por Mauricio Macri) tiene que escucharnos antes de seguir con los recortes indiscriminados, la prioridad es cuidar el trabajo”, sostuvo.

Desde las entidades que representan a los productores agropecuarios, Federación Agraria Argentina (FAA) y CONINAGRO fueron los primeros en pronunciarse, a poco de conocerse la medida. Omar Príncipe, presidente de los federados, sostuvo que la quita de los fondos “van a desaparecer van a impactar fuertemente en cada municipio, en cada comuna y en las mismas provincias, que contaban con estos recursos”.

Por el lado de los cooperativistas, su presidente Carlos Iannizzotto señaló que esta decisión “resta competitividad a las producciones y fondos a los municipios para hacer las obras de infraestructura que el país necesita”.  Además, añadió que “las medidas del gobierno generan incertidumbre a las economías regionales”.

Horacio Salaverri, de la Confederación de Asociaciones Rurales de Buenos Aires y La Pampa (CARBAP), estimó que faltarán recursos, porque el FFS ocupa una parte considerable en los presupuestos municipales. “Cuando a fin de año esto falte, el riesgo es que esos municipios intenten recuperar vía tasas o impuestos lo que se sacó“, señaló el directivo en declaraciones periodísticas.