“Por instrucción de la presidenta Cristina Fernández de Kirchner, y en el marco del diálogo social con empresarios y dirigentes gremiales, avanzaremos en lo inmediato con medidas tendientes a reducir el empleo informal, mejorar la competitividad de las economías regionales y generar nuevas condiciones de inversión”, señaló Kiciloff.

El ministro lo dijo en la apertura de una nueva reunión con los hombres de negocios y los sectores del trabajo en la Casa de Gobierno.

Kiciloff, acompañado por gran parte del gabinete nacional, dejó en claro que estas iniciativas tienen por objetivo abordar “cuestiones centrales” en materia de “financiamiento, infraestructura y reintegros a las empresas exportadoras”.

Una de las metas del Gobierno será “reducir la tasa de empleo informal por debajo del 30 por ciento en los próximos dos años con un plan integral que necesitará una acción conjunta del Estado, los empresarios y trabajadores”.

En función de esta realidad, se “ampliará la cantidad de inspectores y se creará un registro de empleadores, con la mirada puesta en la registración de unos 480.000 nuevos trabajadores”.

Kiciloff aclaró que se “trabajará fuertemente en los convenios de corresponsabilidad, que funcionaron bien en las actividades vinculadas al sector primario, para ahora extenderlos a otros sectores bajo la tutela del Ministerio de Trabajo”.

En el rubro laboral, el ministro añadió que se “implementará un subsidio al empleo, a través de descuentos en las contribuciones patronales durante dos años, para todas aquellas pequeñas y medianas empresas que incrementen su planta de personal”.

En cuanto a la competitividad de las economías regionales, se “establecerá un régimen de compensaciones para reintegros y devoluciones de exportaciones, y en el caso de las pequeñas empresas se automatizará el trámite para que fluya más rápido”.

También se extenderá por otro año la Línea de Crédito para Inversiones Productivas, que según lo estipulado por el Banco Central implica destinar el 5 por ciento de los depósitos a una tasa del 15 por ciento anual.

“Los recursos de la Línea de Crédito para Inversiones Productivas se ampliarán el año que viene en 22.000 millones de pesos durante el primer semestre hasta llegar a los 100.000 millones de pesos en todo 2014, haciendo foco en las pymes”, indicó el jefe del Palacio de Hacienda.

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Por otro lado, en este caso con la activa participación del Banco Nación, se creará “un fideicomiso de 10.000 millones de pesos, muy flexible, para la concreción de proyectos estratégicos, con alto contenido tecnológico”.

El Gobierno también profundizará los trabajos de infraestructura en “el Belgrano Cargas, con obras de ingeniería y renovación de vías, con financiamiento de capitales chinos”.

Esta batería de medidas implicará una inversión total de 137.000 millones de pesos por parte del Estado Nacional, como así también la generación de 830.000 empleos.

Participaron del encuentro, por parte del gobierno nacional, además de Kiciloff, el jefe de Gabinete, Jorge Capitanich; los ministros de Trabajo, Jorge Tomada; de Planificación, Julio De Vido; del Interior y Transporte, Florencio Randazzo; de Industria, Débora Giorgi; el presidente del Banco Central, Juan Carlos Fábrega; el secretario general de la Presidencia, Oscar Parrilli; el secretario de Legal y Técnica, Carlos Zannini; el secretario de Comunicaciones, Alfredo Scoccimarro, entre otros.

Entre los dirigentes gremiales más importantes asistieron Antonio Caló (CGT), Andrés Rodríguez (UPCN), Gerardo Martínez (UOCRA), Hugo Yasky (CTA) y Víctor Santamaría (SUTERH).

El sector empresarial estuvo representado, entre otros, por Héctor Méndez (UIA), Claudio Cesario (ABA), Daniel Funes de Rioja (COPAL), Carlos Heller (ABAPPRA), José Bereciattua (CAME), Carlos Weiss (Cámara de la Construcción), Juan Carlos Lascurain (ADIMRA), Ider Peretti (CGE) y Norberto Peruzzotti (ADEBA).