El auto, un Toyota Corolla color champagne, modelo 2008, fue encontrado por detectives de la División Homicidios de la Policía Federal tras un llamado anónimo que orientó a los investigadores.

Si bien el Corolla fue secuestrado aún sin ser reparado y con los daños descriptos por los testigos de la escena del crimen, la Justicia ahora espera el resultado de las pericias que confirmen que se trata del vehículo en cuestión para identificar y detener al conductor que lo manejaba la noche del homicidio.

“Es un paso importante. Tenemos el auto, pero lo que más me importa a mí es que ahora sepamos quién lo manejaba esa noche para detener así al asesino de mi hijo”, dijo a la agencia de noticias Télam, Jorge Degli Innocenti, padre de la víctima y funcionario vinculado a las tareas de prensa de la intendencia de Avellaneda, donde es titular del Consejo de Medios Audiovisuales del municipio.

En otro allanamiento realizado también en La Boca los pesquisas secuestraron el Peugeot 307 del hombre que, según la investigación y el relato de los testigos, originó el altercado que derivó en el homicidio, cuando exhibió un arma de fuego a la salida del boliche “Boutique” (ex Museum) de la calle Perú al 500.

“Fue un llamado anónimo el que aportó los datos necesarios para encontrar el auto. Nos dio la zona y gracias a tareas de inteligencia de los detectives de Homicidios, se llegó al taller”, dijo a Télam uno de los investigadores.

La misma fuente contó que “afortunadamente el auto aún no estaba reparado”, que “lo tenían escondido” y que tiene en la parte frontal los daños que describen los testigos.

Ahora los peritos de la Superintendencia de Policía Científica de la Federal deberán cotejar si los restos del auto que quedaron en la escena del crimen -vidrios, partes de la parrilla y del paragolpes delantero y sobre todo uno de los focos de la luces antiniebla, encajan en el Corolla secuestrado.
La causa está en manos de la jueza de instrucción 31, Susana Carta

segna, quien libró las órdenes de todos los allanamientos realizados hasta el momento, y la fiscalía de instrucción 49, cuyo personal realizó las primeras tareas investigativas.

El hecho ocurrió a las 5 del 27 de enero, cuando Degli Innocenti -que estaba casado y era padre de un niño de un año, salió del boliche “Boutique”, situado en Perú 535, de Monserrat, a donde había ido a festejar su cumpleaños número 34.

De acuerdo a los datos aportados por los amigos que acompañaban a la víctima, el joven caminaba por la calle Perú, casi esquina Chile, cuando un Toyota Corolla embistió contenedor de basura y luego lo atropelló.

Los amigos contaron que intentaron detener al auto pero el conductor huyó por Chile, dobló hacia la derecha por Bolívar y volvió a doblar por Independencia, donde fue perdido de vista.

Los investigadores descartaron desde un principio el accidente de tránsito y orientaron la pesquisa hacia un homicidio, vinculado con un altercado que se generó en la puerta del boliche.

El propio padre de la víctima contó a la prensa que hubo un incidente en la puerta entre dos grupos y que un hombre cruzó a un garaje, donde extrajo un arma de fuego de un Peugeot 307 y amenazó a los presentes.