Del Potro, que el viernes había caído en cinco sets con David Ferrer, número cinco del mundo, apabulló en el primer set a Rafael Nadal, segundo del ranking.

El argentino jugó en un nivel extraordinario y el golpe de derecha fue su arma mortal. Hacía 3 años que Nadal no perdía un set jugando Copa Davis pero éste domingo se topó con un Del Potro enorme, que arriesgó en todo momento y no lo dejó jugar.

Y la última vez que perdió sobre polvo de ladrillo por 6-1 fue ante su compatriota Juan Carlos Ferrero, en Roma 2008.

En el segundo parcial, Nadal salió a jugar como un león herido y mostró que le sobran agallas para este tipo de partidos. Primero lo emparejó y después lo ganó por 6-4.

Y a partir del tercer set se hizo dueño absoluto del partido. Del Potro, muy cansado por el partido del viernes, es una sombra del primer set y encima tiene enfrente al mejor jugador de la historia sobre polvo de ladrillo.

El cuarto set fue absolutamente de película: Nadal arrancó 2-0 y parecía que el triunfo estaba en sus manos. El público argentino empezó a gritar de forma ensordecedora y Del Potro lloró antes de sacar.

Primero emparejó el encuentro y luego se puso 5-3 arriba. No lo pudo cerrar, Nadal se lo dio vuelta, se colocó 6-5 pero Del Potro forzó el tie break.

Y allí Nadal fue el mejor, se impuso 7-0, y España ganó la Copa Davis.