Antonio Hugo Caruso, un «hacedor» de la cultura que tuvo su reconocimiento

El nuevo centro cultural que funciona en el ex mercado de abasto lleva su nombre.

Luego de varias décadas trabajando por la cultura desde Avellaneda, la Provincia de Buenos Aires, el Sindicato Luz y Fuerza, y la Universidad de Belgrano, Antonio Hugo Caruso tuvo este año un merecido reconocimiento: el flamante centro cultural inaugurado en el predio del ex mercado de abasto lleva su nombre.

“Yo siempre dije que el nombre es lo de menos, lo que importa es lo que se puede hacer, pero no hay ninguna duda que es algo muy emotivo, muy impactante”, expresó el actual Secretario de Cultura, Educación y Promoción de las Artes al referirse a esa distinción.

Como si eso fuera poco, Antonio Hugo Caruso recibió pocos días después otro emotivo reconocimiento en Italia, en la comunidad de Cariati, muy cercana a sus afectos y a su historia personal, porque allí nacieron sus padres.

“Desde aquel día de mayo en que se inauguró el centro con un acto, donde vino mucha gente, hasta esta distinción que me dieron en Italia, son cosas que provocan emociones distintas al resto de los días y que todavía duran, porque son cosas que uno nunca busca y aparecen”, explicó Caruso.

En ese sentido, expresó su agradecimiento a “toda la gente que trabajó con uno y que permitió que se puedan hacer todas las actividades desde todos los lugares, desde Luz y Fuerza, la Universidad, la provincia de Buenos Aires y Avellaneda, que es la ciudad donde nací”.

Uno de los motivos que le permiten a Antonio Hugo Caruso concretar cada una de sus iniciativas es, sin duda, la planificación. “En 2005 publiqué un libro sobre cómo trasformamos al viejo edificio municipal en el Centro Cultural Barracas al Sud, y en ese libro está el proyecto de este nuevo centro recientemente inaugurado”, aseguró.

“Además desde 1994-95 está el proyecto de la Universidad Nacional de Avellaneda, quiere decir que había toda una idea, un plan cultural que fuimos cumpliendo, es más, hicimos más de lo que estaba escrito”, remarcó Caruso.

“La Universidad fue un gran deseo de Avellaneda desde hace muchos años y la verdad que hace 16 años que lo venimos proyectando y ahora se concretó -agregó- a veces no se tiene dimensión de todo esto, la dimensión se va a tener con el tiempo”.

Para graficarlo, Caruso recordó cuando en la década del ’40 Avellaneda hizo su primer jardín de infantes o cuando en el ’49 iban los chicos a estudiar en la orquesta escuela con el maestro José Rodríguez Fauré, que con el tiempo se transformó en el Instituto de Música.

“De aquel primer jardín de la provincia de Buenos Aires, con el tiempo se convirtieron en 39. Con el Centro Cultural nuevo pasa lo mismo, ahora son tres institutos como el de Fotografía, Música y Danzas que están ahí, pero no sabemos que le depara el futuro, hasta dónde pueden crecer”, puntualizó Caruso.

“Con la Universidad también pasa algo parecido -añadió- arranca en 2011 con algunas carreras pero el futuro es indeterminable, porque si Avellaneda se caracterizó siempre por atender la educación, la cultura y el deporte, ahora tiene la oportunidad de perfeccionarse y hacer un trabajo de excelencia”.

“Con esta universidad -comentó Caruso- el chico puede desarrollarse íntegramente en Avellaneda, iniciando su sociabilización en un jardín maternal o de infantes, pasando a la escuela primaria, la secundaria y ahora a los estudios universitarios”.
“Ojalá podamos terminar con la marginalidad social, porque nadie de chico piensa que cuando sea grande va a pedir en las esquinas, limpiar vidrios o dormir en un colchón en la calle, somos todos los integrantes de la sociedad, no solo los que gobiernan, los responsables de hacer que esas cosas no pasen”, aseguró.

“Por lo que yo peleo y peleé en mi vida es para que no pase esto -enfatizó Caruso- porque estoy convencido que si la gente tiene el alimento suficiente, atención a la salud y educación, puede formarse, tener un trabajo, y, con trabajo, puede tener una familia y así va desarrollando una vida”.

Una vida dedicada a la cultura
Antonio Hugo Caruso nació en Avellaneda y vivió toda su vida en ella, aunque su trabajo trascendió las fronteras de su pago chico. Luego de estudiar arte dramático, comenzó su labor cultural en los años ’70 al desempeñarse como secretario de Cultura, Educación y Deportes del Sindicato de Luz y Fuerza.
“Esos años de Luz y Fuerza fueron gloriosos, en esa época Argentina vivió una fuerza cultural, social, artística y hasta deportiva muy importante, y del trabajo ni que hablar. Antes no se hablaba ni de desocupación, ni de tasas, todo el mundo trabajaba y había un desarrollo intelectual muy importante”, evocó Caruso.
Con respecto a sus primeros logros en el gremio, el actual Secretario de Cultura comunal recordó que “en Luz y Fuerza empecé a organizar algo no común para un sindicato, que es que tuviera escuelas”.
“Si bien ya había un grupo de teatro, algunos artistas plásticos y algo de capacitación para el trabajo, se armó una revolución muy grande trabajando en alfabetización, creando jardines de infantes y escuela secundaria, y después recorrí casi todo el país creando centros”, resumió.
A fines de los ’70 y hasta 1982, Antonio Hugo Caruso se desempeñó como coordinador de actividades culturales en la Universidad de Belgrano, donde desarrolló la programación cultural del “Auditorio UB”, generando ciclos de cine, teatro, danza, música y muestras plásticas.
A partir del ’83, dejó de ser “coordinador” en la Universidad para pasar a ser Secretario de Cultura promoviendo una gran cantidad de actividades
Entre 1987 y 1991, Antonio Hugo Caruso fue el responsable de la Subsecretario de Cultura de la Provincia de Buenos Aires, cargo para el que fue designado por el entonces gobernador Antonio Cafiero.
Desde su cargo, Caruso propició la descentralización e impulsó una amplia reforma en el marco legal, administrativo y cultural en la Provincia, con amplio sentido federalista, llevando a la práctica una regionalización del territorio bonaerense para el logro de una mejor integración y aprovechamiento de los bienes y recursos culturales de cada sector.
Tras su paso en 1990 como Director del Fondo Nacional de las Artes, asumió en 1991 como titular del área de cultura de Avellaneda, organizándola en tres sectores: Arte y Espectáculos, Enseñanza Artística y Patrimonio Cultural.
En 2001, fue convocado por la Honorable Cámara de Diputados de la Provincia de Buenos Aires como Asesor Cultural, tarea que desarrolla en la actualidad, implementando el Programa Pro Buenos Aires “Por la identidad Cultural Bonaerense”.
Mediante esta iniciativa, trata de generar espacios creativos y culturales a lo largo de la Provincia a través de la realización de eventos tales como concursos artísticos, charlas, paneles y mesas redondas; exposiciones y actuaciones de artistas populares bonaerenses.

Con la vuelta de Baldomero Álvarez de Olivera a la intendencia de Avellaneda, Antonio Hugo Caruso volvió a ocupar el cargo de Secretario de Cultura, Educación y Promoción de las Artes, puesto que sigue ocupando también bajo la gestión del Ing. Jorge Ferraresi como Intendente.

Sindicato Luz y Fuerza
• Creó el Instituto de Educación Sindical, el Instituto de Artes y Especialidades, el Teatro LyF, la Camerata LyF, el Departamento de la Mujer; el Ballet LyF, Conjuntos folclóricos, etc. Realizó publicaciones sobre temas de sindicalismo, educación y cultura nacional. Estas actividades culturales posibilitaron la presentación de valiosos artistas.

• Generó la creación de Escuelas Secundarias y Centros de Formación Profesional para trabajadores, desarrolló un proyecto de «Universidad para los Trabajadores» e impulsó la movilización educativa para los trabajadores.

Universidad de Belgrano
• Desarrolló el programación cultural del Auditorio UB, generando ciclos de cine, teatro, danza, música y muestras plásticas.

• Propició la creación de Grupos Culturales de la Universidad (Conjunto de Música de Cámara y Música Antigua, Coro UB, Danza Contemporánea, Danzas Nativas, Teatro LTB, Teatro Infantil, de Títeres, etc.) y Grupos Musicales.

• Organizó la Galería de Arte; Feria del Libro, salones de pintura, dibujo y escultura, fotografía, literatura, manchas, obras de teatro y la canción Argentina.

Provincia de Bs. As.
• Creó la Dirección de Acercamiento a la Comunidad y el Servicio de Acercamiento Musical de Buenos Aires.

• Dispuso la creación de las Direcciones de Folclore, Patrimonio Cultural y Tradiciones Bonaerenses, Gabinete de Artes Visuales, el Instituto de las Artes, el Pensamiento y la Investigación, el Museo Juan Domingo Perón de Lobos, y la asistencia técnica con salida laboral.

Fue gestor del Proyecto de Ley de Financiamiento Cultural.

Municipalidad de Avellaneda
• Creó el Sistema de Acercamiento Cultural a los Barrios de Avellaneda, con más de cien talleres barriales.

• Impulsó las actividades desarrolladas por los ocho Institutos de Enseñanza Artística, la Orquesta Sinfónica Municipal, la Orquesta Municipal de Tango y el Ballet Municipal.

• Promovió la creación de la Orquesta Juvenil de Avellaneda.

• Puso en funcionamiento la Dirección de Patrimonio Cultural y realizó obras de restauración, reacondicionamiento y construcción en los Institutos Municipales de: Teatro, Folklore y Artesanías Argentinas y Cerámica.

• Auspició la creación del Centro Cultural Barracas al Sud ubicado en el ex Palacio Municipal, donde funcionan el Archivo y Museo Históricos, la Biblioteca Pública Municipal, el Museo de Arte Infantil y Juvenil.

• Promovió la creación de la Universidad de Avellaneda, del Centro Cultural Barracas al Sud y del Centro Cultural que hoy lleva su nombre.

El nuevo Centro Cultural Mercado «Antonio Hugo Caruso»
El Centro Cultural “Antonio Hugo Caruso” está Ubicado en la intersección de España y Colón, y ocupa el predio en el que hasta hace poco tiempo funcionaba el Mercado de Abasto.

El proyecto arrancó hace un año, cuando se definió el traslado del viejo Mercado a un terreno en Sarandí. La idea era aprovechar el edificio construido en 1887 y que oportunamente fuera declarado como “Bien Patrimonial de la Ciudad”.

Así fue que se lo transformó en un ambiente apto para el desarrollo de actividades culturales. En apenas 365 días y con una inversión de cuatro millones de pesos, se recicló el edificio de manera sorprendente: se construyeron aulas, laboratorios, una biblioteca central, baños, vestuarios y oficinas administrativas.

A partir de ahora, funcionarán allí los institutos municipales de Fotografía y de Música, y la Escuela de Danzas Clásicas. Además, cuenta con un Salón de Usos Múltiples para diferentes eventos y convenciones.
En el Instituto Municipal de Música se cursa la carrera de profesorado en Música para los niveles Inicial, Primario y Secundario; Profesorado Instrumental, Tecnicatura en Capacitación Instrumental y Canto. Asimismo, se cursan las carreras de piano, guitarra, violín, viola, violoncello, contrabajo, guitarra eléctrica, bajo eléctrico, flauta traversa, flauta dulce, trompeta, clarinete, saxofón, batería y bandoneón.

En tanto, en el Instituto Municipal de Arte Fotográfico y Técnicas Audiovisuales los vecinos pueden realizar cursos básicos, de extensión y avanzados, además de la carrera de Fotografía, donde se brindan conocimientos teóricos, prácticos y estéticos, y se egresa con el titulo de “Realizador Fotográfico”.

Finalmente, el Centro Cultural “Antonio Hugo Caruso” también fue pensado para albergar a la Escuela Municipal de Danzas Clásicas, en la cual se ofrece la carrera de profesorado, con dos etapas previas denominadas “Preparación” y “Elementales”, y para las más pequeñas se dictan cursos de iniciación, donde se le inculca tanto el arte como los valores de la danza.

Premio «Herakles 2010»
Tras recibir a fin de año pasado el premio “I Sibariti nel mondo”, Antonio Hugo Caruso tuvo el privilegio de viajar hasta la tierra donde nacieron sus padres, en el municipio de Cariati, Italia, donde la comunidad local lo distinguió con la estatuilla “Herakles 2010”, con el cual se rinde homenaje a aquellos que trabajan por la cultura y el diálogo intercultural con las nuevas generaciones, entre otras cosas.

En el acto realizado en la Piazza Friozzi, el Secretario de Cultura comunal expresó su emoción por ser homenajeado por la ciudad que vio nacer a sus padres.
“Tanto mi madre Raquel como mi padre Alfonso eran del municipio de Cariati y fueron a la Argentina como muchos otros inmigrantes, con un gran esfuerzo trabajando de día y de noche, pasando necesidades, pero ayudando a construir el lugar donde ahora vivimos nosotros”, remarcó Caruso.

“Los inmigrantes, no solo los italianos, han ayudado a que la Argentina pueda desarrollarse y nos han dado muchos ejemplos de vida -agregó- yo tomé ese ejemplo del sacrificio, el trabajo, la solidaridad y de contribuir a generar educación y trabajo, apoyando a los jóvenes con arte, deporte y mucha educación.”

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