La Biblioteca Popular y Centro Cultural «Veladas de Estudio Después del Trabajo» está realizando una serie de reformas y ampliaciones en su sede de Entre Ríos 731 (Piñeiro), con el objetivo principal de poder llevar adelante todas las actividades que, desde hace años, les brinda a la comunidad.

En ese sentido, cabe destacar que con esfuerzo y la ayuda del municipio se techó parte del primer piso, se está trabajando en los baños de ese sector y se hizo a nuevo la cocina de la planta baja, entre otras cosas.

«El espacio en la biblioteca era muy escaso para las actividades que se desarrollaban, por lo que tuvimos la necesidad de ampliar, pero el problema era que la ampliación con las características que nosotros queríamos llevar adelante no se podía hacer si no conseguíamos una cantidad de dinero determinada», afirmó el presidente de Veladas de Estudio, Marcos Magneschi.

Para concretar la obra de la planta alta, las autoridades de la institución le presentaron un proyecto a la Municipalidad de Avellaneda, luego de una reunión que mantuvieron los responsables de las Bibliotecas Populares con el intendente Jorge Ferraresi.

«En esa reunión nos propuso que cada biblioteca presentara un proyecto de acuerdo a las necesidades, que si no se podía hacer en una vez, se haría en dos veces -agregó- nosotros estamos muy contentos con la gestión de Ferraresi porque él permitió estas cosas, mantener las bibliotecas desde lo edilicio».

La idea de techar la parte superior del edificio era de vieja data, pero no se podía concretar por cuestiones económicas. Ahora, con la primera etapa del proyecto concretada, «Veladas de Estudio» ya cuenta con una nueva sala para realizar exposiciones y todo tipo de actividades culturales y sociales.

Con respecto a la nueva construcción, Magneschi explicó que como es totalmente diferente al edificio, decidieron no tocar el frente de la biblioteca para no modificar el estilo original e histórico de la casa.

«Ahora queda como una sala más moderna que la original y tiene la particularidad de que se pueden usar las paredes para una muestra fotográfica y el sitio para una puesta teatral, porque alrededor se hizo una grada para que la gente se pueda sentar», detalló el presidente de Veladas.

«Además tiene todas ventanas alrededor y salir por la misma sala a la terraza, que está en desnivel -remarcó- ahora lo que estamos queriendo hacer es una pequeña cocina en la parte cercana a los baños para que no haya necesidad de bajar cuando hay una actividad».

En un principio la idea era hacer una cocina en ese espacio, pero prefirieron no quebrar el estilo exclusivamente cultural de la sala y dejaron dicha construcción para una segunda etapa.

«Antes no se podía usar la terraza, era un sector desaprovechado. Lo único que había eran las parrillas, las cuales se cambiaron de lugar», comentó Marcos Magneschi.

Con la primera etapa del proyecto terminada, ahora están transitando la segunda, con lo que dejarán los baños en excelentes condiciones como así también el sector que conduce a ellos.

«Calculo que para mayo está todo concluido», aseguró el presidente de «Veladas», quien agregó que para concretar la obra el municipio les dio una ayuda económica para la mano de obra y les envía los materiales de acuerdo al proyecto presentado.
«El subsidio lo estiramos como si fuera de goma, porque los costos van cambiando mes a mes. Con la construcción, estamos transformando el caos en un universo», expresó Magneschi.

Cursos en simultáneo
Por lo general, las salas de las bibliotecas son para usos múltiples y el problema de «Veladas de Estudio» era que tenía que usar su salón, que es de grandes dimensiones, para todas sus actividades.

«Hasta ahora nosotros realizábamos todo en la planta baja y es complicado cuando se superponen. Si bien en el sector superior hay una sala que la destinamos a computación, es pequeña», remarcó Marcos Magneschi.

«La idea era tener otro salón para poder hacer actividades en forma simultánea y también un sector para muestras», aseguró.

Con respecto a los servicios, además de los habituales que brinda una biblioteca, «Veladas» ofrece a la comunidad talleres y cursos de canto, guitarra, yoga e idiomas, entre otras cosas.

Por otra parte, continúan con las funciones del Cineclub y con los encuentros anuales de los teatristas de zona sur, que este año tendrá su cuarta edición.

Con recursos propios
Además del proyecto presentado al municipio, «Veladas de Estudios Después del Trabajo» aprovechó para hacer otras obras en sus instalaciones, las cuales fueron realizadas con fondos genuinos de la entidad.

Con mucho esfuerzo y gestión, teniendo en cuenta que los cerca de 400 asociados abonan apenas cuatro pesos como cuota social, la comisión directiva se abocó a otras mejoras edilicias.

«Se hizo una modificación completa de la cocina de la planta baja que era muy chiquita. Se pusieron las mesadas, el piso, la iluminación, un extractor porque es interna y se hizo un pasa platos para tener la posibilidad de trabajar directamente con la sala de abajo», informó Marcos Magneschi.

Además, comenzaron a trabajar en el proyecto de cabina de luces y sonidos para el salón, que cuenta con un escenario de importantes dimensiones, y se dotó al sector de camarines de un nuevo baño.

Por otra parte, se repararon las filtraciones, se hizo la instalación eléctrica nueva y se refaccionó la sala de computación porque una de sus paredes estuvo mucho tiempo expuesta a la humedad y se deterioró.

Como bien le explicó a La Ciudad el presidente Marcos Magneschi, en materia de construcción la comisión directiva trabaja como si fuera la casa de cada uno, soñando, proyectando y dando cada paso solo si se cuenta con el respaldo necesario para darlo.

«Evaluamos incluso si podemos responder con nuestros propios recursos si un subsidio o una ayuda tarda unos días más en llegar -sostuvo- no hacemos nada en forma alocada porque no podes quedarte con una construcción por la mitad y porque a la gente que está trabajando tenés que pagarle».

«Somos un grupo de trabajo con conciencia para lo que haya que hacer. Hay gente que se dedica a la construcción y se ocupa de las obras, otros que se encargan de administrar los recursos y otros de generarlos para poder seguir», concluyó Marcos Magneschi.

Con casi 92 años de vigencia en materia cultural y con un lugar ganado en la historia de Avellaneda, «Veladas de Estudio Después del Trabajo» continúa creciendo desde lo edilicio y ofreciendo más y mejores servicios.

Comisión Directiva
Presidente: Marcos Magneschi

Vicepresidente: Cristina Osimani

Secretario: Guillermo Espiñeira

Prosecretario: Silvia López

Tesorero: Fernando Hrycak

Protesorero: Ana Paganini

Vocales Titulares: Adalberto Ragonese, Antonio Aziz, Silvia Casanova Gabriela Madio y María del Carmen Di Julio.

Revisores de Cuenta: Fabio Magneschi y Lucía Sartoni