«Una plaza para todos», un elogiable proyecto que nació de la comunidad

Una psicopedagoga y un kinesiólogo de nuestra ciudad, junto a alumnos del Centro de Formación Laboral Nº 1, la Escuela Especial Nº 501 y la Escuela Nº 10, trabajan para instalar juegos integradores en espacios públicos de Avellaneda.

Con el objetivo de consolidar espacios públicos comunes y concientizar a la comunidad sobre la necesidad de una verdadera integración, la psicopedagoga Sandra Kitay y el licenciado en kinesiología Lucio Coloma pusieron en marcha el proyecto «Una Plaza para Todos», mediante el cual se buscará dotar a las plazas del distrito con juegos infantiles para chicos de todas las condiciones.

«Tengo un hijo de diez años que tiene parálisis cerebral y Lucio Coloma es su kinesiólogo. Hace cinco años, llevando a mi hijo a la plaza, me di cuenta que no había ningún juego que pudiera aprovechar, yo en ese momento trabajaba en educación especial y empezamos a armar el proyecto», aseguró Sandra Kitay sobre la génesis de esta iniciativa.

En ese momento se planteó la necesidad de crear juegos de plaza adaptados para chicos con discapacidad motriz. Para ello, se sumaron a la iniciativa el Centro de Formación Laboral Nº 1, la Escuela de Educación Especial Nº 501 y el sexto grado de la Escuela Nº 10 «Ricardo Gutiérrez», donde Sandra Kitay es orientadora vocacional.
«Los chicos de la Escuela Nº 10 interactúan con sus pares de la 501 y se ocupan de hacer el boletín informativo para difundir el proyecto y concientizar a la comunidad sobre las necesidades de los otros chicos – explicó Kitay – los integrantes del taller de carpintería de la escuela especial fabrican las partes de madera de los juegos de plaza y los adultos del Centro de Formación Laboral la estructura metálica”.

«Lucio Coloma hizo los diseños de los juegos y yo me ocupo de la parte de gestión, de conseguir los recursos y los insumos», agregó.

«Los diseños son simples, por ejemplo que la hamaca en lugar de tener una tabla tenga una especie de silla con topes y sujeción. No es algo complicado de hacer -aclaró – la idea es que la puedan usar los chicos con discapacidad motriz y también los que no la tienen, que no sea exclusiva».

Por otra parte, la idea también es útil desde lo educativo porque todos los chicos que participan le dan algo a la comunidad y demuestran que son útiles. Además, los alumnos de la Escuela Nº 10 pueden reconocer en el otro a alguien útil, más allá de las capacidades diferentes.

«El proyecto es novedoso, más allá de la fabricación de los juegos, hay todo un trabajo de integración y difusión que es lo más fuerte en todo este proceso», remarcó Kitay.

Los comienzos no fueron fáciles, estaban los diseños pero faltaban insumos y herramientas. «Desde 2006 que estamos buscando los recursos, que no eran muchos para el proyecto pero sí para las escuelas», afirmó Kitay, quien además informó que las herramientas necesarias fueron donadas por el municipio.

En relación al permiso para instalar estos juegos en los espacios públicos, la responsable del proyecto aseguró que están trabajando en forma mancomunada con la subsecretaría de Obras Públicas, área que se encargará de la instalación.

En ese sentido, el primer juego se instalará en diciembre en la plaza «Marcelino Ugarte», en la intersección de Rivadavia y Lebensohn, frente al Centro de Formación Profesional Nº 1.

El objetivo de «Una Plaza para Todos» es que en un plazo no muy largo, todas las plazas de Avellaneda tengan al menos, entre los otros juegos, uno integrador. Sobre este punto, cabe destacar que la idea es integrar los juegos y no poner un sector aparte como tiene la plaza «Lolita Torres», porque eso no tiende a la integración.
«Yo también tengo una nena de cinco años y cuando voy a la plaza con ellos tengo que cruzar a la de enfrente para que juegue mi hija. La intención fue bárbara, pero no es integradora», puntualizó Kitay.

Finalmente, aseguró que en un principio se comprometieron a equipar siete plazas y que van a empezar por la «Marcelino Ugarte» porque reúne las condiciones adecuadas.
«Esa plaza es grande, está protegida por un cerco y además tiene cerca un centro de jubilados y un jardín maternal. Es decir que a nivel comunitario es una plaza importante», concluyó Sandra Kitay.

Aquellos interesados en colaborar con la iniciativa «Una Plaza para Todos» podrán acercarse a cualquiera de las tres instituciones que impulsan la idea o escribir a sandrakitay@yahoo,com.ar

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