El Consejo de Gestión y Reducción de Riesgo de Desastres informó que la víctima fatal es de la provincia de Samar del Norte, pero aclaró que la cifra podría aumentar ya que la tormenta sigue sobre territorio filipino.

El organismo dijo que las intensas precipitaciones y vientos sostenidos de 140 kilómetros por hora dejaron esta provincia y la de Samar Oriental sin corriente eléctrica ni red de comunicaciones.

En Samar del Norte más de 7.000 hogares quedaron completamente destruidos, según las autoridades locales, citadas por EFE.

Además, otras 16 provincias siguen en estado de alerta ante la previsión de la agencia meteorológica PAGASA que advirtió sobre intensas precipitaciones en los 250 kilómetros de diámetro de la tormenta y de marejadas marítimas de 2 metros de altura en las zonas costeras.

PAGASA estima que Melor, que se desplaza en dirección oeste a 15 kilómetros por hora, abandone territorio filipino en la tarde de hoy y salga de aguas filipinas el próximo viernes transformado ya en una borrasca.

El huracán, causó la suspensión de las clases en todos los centros educativos de 16 provincias, y desde ayer se prohibió todo tipo de navegación en las zonas afectadas, por lo que más de 7.300 pasajeros quedaron varados en los puertos.

Las autoridades también se vieron forzadas a cancelar más de 70 vuelos nacionales.
Entre 15 y 20 huracanes recorren todos los años Filipinas durante la temporada lluviosa, que empieza por lo general en junio y concluye en noviembre.