Lucas Flores falleció esta madrugada de modo accidental tras tomar contacto con un cable de alta tensión desprendido en el barrio San José por el viento que acompañó el temporal de agua que azotó a la capital de Corrientes, confirmó a Télam el jefe de Operaciones de la Dirección de Defensa Civil de la provincia, Orlando Bertoni.

El niño, que se desempeñaba en las divisiones inferiores del club de fútbol Boca Unidos, había salido para cooperar por la urgencia devenida del temporal en su barrio.

En tanto, 16 familias fueron evacuadas a la escuela 299 del barrio Galván, debido al anegamiento de las viviendas cercanas a una zona de escurrimiento natural de la ciudad, donde unos 150 milímetros de lluvia se precipitaron hasta esta mañana.

“En solo 40 minutos cayeron 80 milímetros de agua esta madrugada, a las 3 aproximadamente, lo que significó un caudal muy grande para tan poco tiempo lo que extralimitó la capacidad de escurrimiento de la ciudad”, dijo el directivo de Defensa Civil.

“Estamos complicados”, definió Bertoni, mientras que el intendente de Corrientes, Fabián Ríos, indicó que la ciudad está “en estado de emergencia”.

Asimismo, alrededor del 45 por ciento del ejido urbano permanece sin suministro eléctrico por el derribo de postes y cables, así como árboles, que obliga a la Dirección Provincial de Energía de Corrientes a trabajar “con cuadrillas reforzadas”, según se informó oficialmente.

En el interior provincial el panorama fue similar, con tres familias evacuadas en la localidad de San Roque por la caída de 160 milímetros esta madrugada.

En Santa Lucía cayeron 100 milímetros de lluvia, en tanto que en San Miguel, donde 30 viviendas permanecen anegadas con agua en su interior, se registraron 200 milímetros, informó el jefe de Operaciones de la Dirección de Defensa Civil de la provincia.