La provincia de Buenos Aires presentó los primeros resultados de un estudio sobre apuestas online realizado a más de 90 mil estudiantes de entre 12 y 19 años. Se trata de la encuesta más grande de Argentina y el objetivo es tener una herramienta que permita realizar mejores diagnósticos y acciones vinculadas a la prevención y atención de la ludopatía. Del trabajo se desprende que casi el 20 por ciento de los chicos realizó una apuesta online. Sin embargo, menos del 4 por ciento contestó que apuestan al menos una vez por mes (considerados “apostantes frecuentes”). “Nos parece fundamental saber en profundidad cuál es el alcance y la gravedad del problema entre los menores. Si bien es una problemática que está presente y es discutida, no estaba lo suficientemente estudiada. Por eso, llevamos adelante la encuesta de bienestar digital en la Provincia”, señaló el ministro de gobierno Carlos Bianco en conferencia de prensa.

La encuesta se enmarca en el Plan Provincial de Prevención y Tratamiento de la Ludopatía Adolescente presentado a principios de julio y que incluye estrategias de análisis, prevención, concientización, atención, regulación y denuncia. En este sentido, uno de los resultados fue que, de las 10 plataformas más utilizadas por los menores de edad para apostar, seis son legales.

“Hasta ahora pensábamos que los chicos y las chicas que apostaban online y eran menores de edad lo hacían en plataformas ilegales. Sin embargo, nos llevamos la sorpresa que también lo hacen y de forma masiva en plataformas legales. Ya estamos trabajando con las empresas para que avancen con la implementación del sistema de datos biométricos”, explicó el ministro. El propósito de esta medida es que los menores no puedan validar las cuentas con los datos de personas mayores edad para violar las normativas vigentes.

Dentro de las 90 mil personas encuestadas, el 1,8 por ciento apuesta una vez por semana y el 0,4 por ciento lo hace de forma diaria. Además, los datos arrojan que los varones son los que más apuestan y que suelen hacerlo cuando están solos entre la noche y la madrugada.

“Entendemos que hay un trabajo a realizar de cuidado y prevención, pero que no es solo un problema del campo de la salud mental en términos subjetivos o individuales, sino que también queremos plantearlo como un problema social y hay que construir herramientas que permitan un abordaje comunitario. Cada vez está más confirmado que las estrategias de regulación no solo parten de los chicos, sino de las familias, los colegios y los entornos comunitarios donde participan”, resaltó Julieta Calmels, subsecretaria de salud mental, consumos problemáticos y violencias, también en conferencia.

Entre la falta de trabajo y la suba de los precios cotidianos, la mayoría de los apostadores frecuentes dijo que apostaban para ganar su propia plata, divertirse y ayudar a su familia. A su vez, las consecuencias que destacaron fueron dormir menos, enojarse con mayor facilidad, sentirse más ansioso, más cansado, y compartir menos tiempo con seres queridos.

El estudio realizado por la provincia de Buenos Aires va en línea con la media sanción que tuvo en el Congreso Nacional el proyecto para regular las apuestas deportivas y prevenir la ludopatía y con las diferentes iniciativas a nivel mundial vinculadas a la salud mental que incluso buscan prohibir el acceso de menores de edad a las redes sociales.

Por Nicolás Retamar