Ni los organismos públicos se salvan de la denominada «inseguridad».

Dos delincuentes armados ingresaron en horas de la mañana de ayer a una de las sedes de la Defensoría del Pueblo de Avellaneda, ubicada en la esquina de la calle Arenales y Avenida Mitre, y asaltaron a los empleados del organismo, a quienes les sustrajeron dinero de sus sueldos y otros efectos personales.

Según confirmó a La Ciudad el Defensor del Pueblo, Dr. Sebastián Vinagre, quien no se hallaba presente en el lugar en el momento del robo, por encontrarse de vacaciones, los delincuentes actuaron en forma muy rápida, amenazaron a los empleados con armas de fuego y les robaron dinero, celulares y pertenencias personales.

El hecho ocurrió entre las 10.30 y las 11 de la mañana, a plena luz del día y en el centro de nuestra ciudad.