En el marco del plan de saneamiento del Riachuelo, la empresa Aguas y Saneamientos Argentinos (AySA) construirá tres estaciones de aireación en Avellaneda, que se sumarán a dos más en Lanús y otras dos en Lomas.

Así quedó establecido en un convenio suscripto entre la empresa y el municipio, que fue aprobado en la última sesión del Concejo Deliberante local.

Según explicó a La Ciudad el presidente del cuerpo, Armando Bertolotto, el sistema de las plantas aireadoras previstas para el Riachuelo, consiste en bombear una fracción significativa del caudal del río hacia un pequeño reservorio elevado, desde donde el agua vuelve a caer a través de una serie de cascadas, produciéndose su reaireación.

Las tres plantas que serán construidas en Avellaneda estarán ubicadas en la Isla Maciel, y en las cercanías de los puentes Pueyrredón y Bosch.

Bertolotto adelantó además que la empresa AySA tiene proyectado también construir un Museo del Agua en la Isla Maciel. «La idea es que cuando sea reparado el Puente Transbordador Nicolás Avellaneda, la Isla Maciel se integre al paseo turístico de la zona de Caminito y La Boca», detalló el titular del Concejo Deliberante.

«En 200 años, es la primera vez que se está haciendo algo por el saneamiento del Riachuelo», valoró Bertolotto, en relación a las acciones que se ejecutan en nuestra ciudad, en el marco de la causa judicial que lleva adelante el juez federal de Quilmes, Luis Armella.

Al respecto, Bertolotto remarcó la renovación de los contratos con cooperativas de trabajo para que continúen con los trabajos de limpieza y desmalezamiento de los márgenes del Riachuelo; el reflotamiento de los barcos hundidos; y la liberación total de la traza del denominado Camino de Sirga. «Del lado de Avellaneda ya no hay asentamientos sobre el Riachuelo – no ocurre lo mismo en la Ciudad Autónoma – ni edificaciones que obstruyan el paso y está todo listo para que se construya la última etapa del camino de la Ribera», aseguró.

Asimismo, Bertolotto destacó un gran emprendimiento industrial privado que se radicará en el predio de la ex Tamet (una antigua metalúrgica ubicada junto al Puente Bosch). «Serán ocho hectáreas de industrias no contaminantes», adelantó.
Sobre este tema, el presidente del Concejo local reveló que la empresa a cargo del emprendimiento encontró en el predio «una vieja edificación, de ladrillos ingleses cerámicos, similar a las que se encontraban en Puerto Madero, que correspondía a un Hotel de Inmigrantes. La empresa donó esa edificación al municipio y allí está proyectado construir un Museo de los Inmigrantes», anticipó.