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Museo Ornitológico de Avellaneda

Funciona en Beruti 216 de Avellaneda. En la foto María del Carmen Garobbio Presidenta de la Sociedad Popular de Educación -entidad propietaria del Museo Ornitológico – y Ricardo Pinter quien desde 1997 está a cargo del mantenimiento de la colección.

En Avellaneda se encuentra una sorprendente  colección de pájaros tratados con la técnica de la taxidermia que data de principios del Siglo Entrevistamos a María del Carmen Garobbio Presidenta de la Sociedad Popular de Educación -entidad propietaria del Museo Ornitológico – y a Ricardo Pinter quien desde 1997 está a cargo del mantenimiento de la Colección.

 

¿Cómo nace la colección que podemos observar hoy?

MCG: Fue comprada por la Sociedad Popular al poco tiempo de su creación.  Tiene casi 300 aves. Y actualmente se esta ampliando con 100 piezas donadas por Pinter.

 

RP: Fui invitado para restaurar las aves que estaban sin mantenimiento desde el año 1919. Estaban caídas y torcidas. Mi trabajo fue volverlas a posicionar y arreglarlas. Un  alambre como esqueleto les da la forma y se rellenan de algodón. Los ojos son de vidrio y a veces uso plastilina para darles color. Utilizo ramas para montar las aves para que se vean de forma mas natural.

 

¿Hay un antes y un después desde esa puesta en valor?

MCG: Sin duda. Trabajamos durante un año en la restauración y clasificación. Los nombres científicos fueron sacados del libro “Aves Argentinas y Uruguayas” de la Asociación Ornitológica del Plata.  Se hicieron en tarjetas blancas y con letras impresas por computadora.

 

¿Tienen alguna pieza de su preferencia?

RP: Cada pájaro tiene su recuerdo y su belleza. Por su tamaño destaco el carancho, que está con las alas abiertas,y si observan el reborde del pico – llamado “curúncula” – está pintado de rojo, porque excepto las plumas,  el resto del ave pierde su color original. También el chiflón, la garza de color beige, los petirrojos, los churrinches…

 

MCG: Las cigüeñas y los chajaes son unos de mis favoritos. Me emocionan porque los observo vivos cuando recorro la Provincia de Buenos Aires.

 

¿Cómo llegan las aves a la taxidermia?

RP: Es una preocupación muy común. Cuando vienen los chicos les llama la atención la quietud de los pájaros y preguntan si los mataron. Si bien las aves más antiguas que están en el museo las conseguían cazadores que iban especialmente a la selva para  llevarlas a los museos, en la actualidad solo se trabaja con aves que murieron por otras causas. En una época los comerciantes de la Feria de Domínico  las regalaban cuando fallecían. Cambiaron mucho las costumbres a favor de la fauna.

 

¿Cómo es el vínculo con el visitante?

RP: La gente que viene al museo busca siempre los pájaros que ya conoce y luego amplía su conocimiento.

MCG: Hay interés. Vienen muchas escuelas y también especialistas y artistas. Hugo Tempesta estuvo un año fotografiando las aves para su revista “Avellaneda en fotos”.

 

La charla se interrumpe ante la llegada de una docente con un grupo de trabajadores que cursan la terminalidad de sus estudios básicos. Pinter se despide de nosotros y comienza la visita guiada. Entre diálogos y mateada por medio despliega sus amplios conocimientos sobre las aves, su hábitat y costumbres. María del Carmen nos acompaña hasta la puerta con satisfacción. El trabajo de años de la institución y el especialista en pos del patrimonio está rindiendo sus frutos.

 

Museo Ornitológico. Berutti 216. Solicitar visitas al 4201 – 6858

 

*Nota realizada por Carolina Ledesma, Agustina Maciel, Mónica Cardozo Medina, Giuliana Portillo y Nancy Sacido, dentro del Proyecto de Capacitación PROMOTORES DE MUSEOS/Ministerio de Trabajo, Previsión y Empleo de la Nación-Municipalidad de Avellaneda. Contactos: xpatrimoniourbano@gmail.com FB Una tarde en los museos

 

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