Según anticiparon a Télam fuentes oficiales, Gabriel Michetti llegará este miércoles a primera hora a la capital estadounidense y la recibirá el embajador Martín Lousteau, quien le organizó un cargado itinerario de actividades y con quien mantiene una vieja amistad personal.

Si bien el encuentro entre ambos en Washington es inevitable -por sus respectivos cargos-, una nueva foto conjunta entre Michetti y Lousteau hará ruido en el interior de Cambiemos, especialmente en el marco porteño, en el que el PRO que conduce Horacio Rodríguez Larreta compite con la coalición ECO de Lousteau (y que integran la UCR, el PS y la Coalición Cívica).

Si bien en el pasado tanto Michetti como Lousteau expresaron públicamente su voluntad de trabajar en el mismo espacio en algún momento -incluso, en el momento previo a las PASO para la jefatura de gobierno hubo versiones de que compartirían fórmula-, la vicepresidenta está alejada de la dinámica política porteña y Lousteau por ahora no confirma si competirá en 2017.

En tanto, Michetti tiene previsto en Washington un encuentro con residentes argentinos en Estados Unidos para convocarlos a participar de un proyecto que impulsa para mujeres artesanas del NOA, que apunta a cooperar con la exportación de textiles con valor agregado.

Además, tendrá reuniones con ONGs y agencias gubernamentales norteamericanas especializadas en empleo, discapacidad y género, además de un encuentro en la sede de la embajada argentina con todos los embajadores latinoamericanos en Estados Unidos.

Pero el evento principal -motivo del viaje- será el jueves por la mañana en el hotel Washington Hilton, en donde tendrá lugar el National Prayer Breakfast, un tradicional desayuno interreligioso con invitados de más de 100 países y que se realiza el primer jueves de cada febrero.

Desde Dwight Eisenhower (1953), todos los presidentes estadounidenses acuden al evento, y este año no será la excepción: Donald Trump confirmó la asistencia al evento y se espera que brinde un discurso, en momentos en que su segunda semana de gestión atraviesa la polémica por su prohibición al ingreso de extranjeros provenientes de siete países de mayoría musulmana.

Michetti compartirá el evento con Trump -junto a otros 3.000 invitados- pero no está planeado un encuentro ni foto con el flamante presidente, con quien la Casa Rosada espera acordar una reunión en los próximos meses.