El hecho ocurrió en la madrugada del domingo, en avenida Sarmiento, casi esquina Colombia, en un sector de la plaza Intendente Seeber, a metros de la embajada de Estados Unidos, en la Capital Federal.

Fuentes policiales informaron a Télam que todo comenzó cuando la víctima, identificada como Sebastián Sánchez Guevara (26), pasaba por la plaza junto a dos amigos y compañeros de trabajo con los que había concurrido a un boliche de la zona.

Los investigadores creen que en ese lugar, estos tres amigos se cruzaron con un grupo de cinco personas, tres hombres y dos mujeres, con el que se generó un enfrentamiento.

Para los pesquisas, la víctima y sus amigos no conocían a las otras personas y tampoco habían mantenido un altercado previo en el boliche ya que habían estado en locales distintos.

Según las fuentes, en la plaza se originó una riña en la que Sánchez Guevara recibió golpes, principalmente de puño ya que no se encontraron indicios de que haya utilizado algún elemento contundente.

La pelea terminó cuando la víctima quedó malherida y tendida sobre la vereda que da a Sarmiento, tras lo cual, sus amigos llamaron al 107.

Voceros médicos señalaron a Télam que el personal del Servicio de Atención de Emergencias Médicas (SAME) llegó poco después al lugar del hecho en una ambulancia y constató que el joven golpeado ya estaba muerto.

Por su parte, los efectivos de la comisaria 23ra. que arribaron a la escena del crimen aprehendieron en un primer momento a los tres hombres y dos mujeres, aunque estas dos luego fueron liberadas ya que no habrían participado de la golpiza que recibió la víctima.

En ese sentido, los pesquisas apuntan a uno de los tres sospechosos masculinos apresados como quien aplicó la mayor cantidad de golpes que recibió Sánchez Guevara.

Mientras los peritos de la Unidad Criminalística levantaron rastros del lugar del hecho -cuyos alrededores eran bastante transitados por vehículos y peatones que aprovechaban las buenas condiciones climáticas para pasear- los amigos del joven muerto permanecieron junto al cadáver.

En esas circunstancias se pudo observar que alguno de ellos tenían lesiones en el rostro y brazos producto de la riña.
De hecho, una fuente de la investigación indicó que los apresados también se encontraban golpeados.

En tanto, los investigadores esperan poder hallar imágenes de lo ocurrido en los videos grabados por las cámaras de seguridad de la ciudad y también de la embajada norteamericana para establecer con precisión las circunstancias de lo ocurrido.

La principal hipótesis que manejan los pesquisas es que la riña se originó por una diferencia del momento entre el grupo de la víctima y el otro.

El hecho, caratulado como homicidio en riña y lesiones, es investigado por el juez de Instrucción porteño 27, Alberto Baños, quien decretó el secreto de sumario, al tiempo que espera para las próximas horas los resultados de la autopsia al cuerpo de la víctima para determinar la mecánica de la muerte.