En el ámbito turístico se conoce que este feriado es el “termómetro” que marca el ritmo de lo que será la temporada estival. En esa línea, Crotto explicó que muchos visitantes deciden elegir “lo antes posible” los alojamientos de mayor categoría que “son los que más rápido se completan porque los turistas son cada vez más exigentes y buscan mejores servicios”.

Comentó además que a pesar de ser el 2011 un año electoral, “los resultados de las primarias incentivaron a las familias a reservar por adelantado alojamientos y casas en destinos como Cariló y Pinamar, y a realizar muchísimas consultas”. Asimismo, a pesar de la devaluación del Real en Brasil, la costa argentina continúa siendo más competitiva “si tenemos en cuenta la distancia, los gastos de traslados y la variedad de oferta para todos los bolsillos”, enumeró.

Un detalle más: hubo un importante crecimiento de la construcción de hotelería y departamentos en la zona costera, fundamentalmente en Mar del Plata, por lo que el mercado inmobiliario es mayor que en otros años.

Crotto remarcó además que los turistas “se mostraron entusiastas por adelantar sus vacaciones a la última semana de diciembre” que involucra las fiestas de fin de año y la partida del Dákar desde Mar del Plata “ya que desde el día 26 los equipos competidores se instalan en la ciudad para realizar las operaciones técnicas” de los vehículos participantes.

En declaraciones radiales, el Secretario relató que a pesar de las condiciones climáticas “la ocupación fue mayor al 75% promedio en alojamientos de Pinamar, Mar del Plata y algunas localidades del Partido de La Costa y han sido escasas las reservas que se cayeron a partir de los anuncios del mal tiempo”.

Quienes se vieron beneficiados por el clima fueron los comercios porque los turistas aprovecharon el día para hacer compras, ir al cine, al teatro, tomar el té en las confiterías céntricas o aprovechar de la variedad de opciones que ofrece la Costa Atlántica.

El movimiento turístico del fin de semana en el que se conmemora el Día del Respeto a la Diversidad Cultural, no sólo fue intenso en la Costa Atlántica, ya que Tandil, por ejemplo, superó el 85% de reservas, Sierra de la Ventana el 75%, San Miguel del Monte y San Pedro el 90%, y las ciudades termales como Carhué, completaron su oferta de alojamiento en cabañas, mientras que en establecimientos 4 estrellas superaron el 80% de ocupación