Entre estanterías repletas de lápices, cuadernos, carpetas y otros artículos escolares, y ese aroma particular que se percibe en toda librería, aparece la figura amable de Angel Gilburt, vecino de Avellaneda, cara visible y uno de los responsables de «Librería El Angel», ubicada en Av. Mitre 972, pleno centro de Avellaneda.

Consultado sobre la vuelta a clases, época «pico» para su trabajo diario, Angel explicó que los chicos son muy exigentes a la hora de comprar sus útiles escolares y que son ellos los que deciden la compra, mientras que sus padres sólo cumplen el rol de efectuar el pago.

Por tal motivo, «Librería El Angel», cuenta con un vasto stock y una gran variedad de productos para la vuelta a clases. Lo más apreciado por los colegiales son las tradicionales marcas que identifican la línea escolar y los productos bajo licencias como: 47 Street, Kevingston, Muaa, Sarah Kay, Betty Boop, Ben10, Hello Kity, licencias de fútbol, entre otras.

Varias de las licencias mencionadas son marcas de ropa que lanzaron una línea de artículos escolares, con la finalidad de captar de manera distinta a un nuevo público.

«Librería El Angel», brinda la posibilidad de pagar la compra con todas las tarjetas de crédito, en 3 cuotas y sin interés, además de convenios celebrados con varios bancos.

Para mayor información de los productos que comercializa «Librería El Angel» pueden visitar su sitio web: www.libreriaelangel.com o comunicarse de lunes a viernes de 9 a 20 ó sábados de 10 a 14 horas a los teléfonos 4222-8242/5426 o por mail a: info@libreriaelangel.com

«Librería El Angel», sus comienzos
En la charla con La Ciudad, Angel Gilburt, titular del comercio, contó que todo comenzó en el año 1999. Un grupo de cuatro amigos, estudiantes, observó que las librerías existentes en la zona céntrica de Avellaneda, solo trabajaban la línea escolar, fue así que decidieron cubrir ese espacio y abrir las puertas de su primer local en la calle Laprida 63, funcionando como librería comercial e innovando con servicios como el de entregas a domicilio, que por ese entonces no se ofrecía.
Pasaron cinco años, y como el local les quedaba chico, decidieron mudarse a un nuevo espacio mucho más cómodo y a pocos metros del que ya estaban trabajando. Para ese entonces, solo dos de los cuatros socios continuaban con la librería: Angel Gilburt y Javier Mops.

En el año 2009, continuando con el proceso de crecimiento, se instalaron en local de la Avenida Mitre 972, donde en la actualidad comercializa sus artículos «Librería El Angel». El mismo cuenta con varios metros cuadrados destinados a una excelente vidriera comercial, sobre la avenida Mitre, salón de ventas y un variado depósito de productos en lo que respecta a la línea comercial, escolar y artística.