La Sala del Cine Municipal de Wilde, ubicado en las calles Juan Cruz Varela y Onsari, fue bautizada el sábado último con el nombre del reconocido actor Pablo Echarri, quien se hizo presente en la ceremonia, acompañado por su esposa y afamada actriz, Nancy Dupláa, sus hijos, su madre y su hermana, Rosana Echarri.
La denominación de la Sala fue elegida por los propios vecinos, en homenaje al joven actor nacido y criado en Wilde, y fue formalizada durante un acto encabezado por el intendente de Avellaneda, ingeniero Jorge Ferraresi, quien concretó este año un viejo sueño del barrio: la construcción del Cine Municipal de Wilde.
«Elegimos el nombre de Pablo porque, además de ser un hombre del barrio, y que los vecinos lo quieren, lo hemos visto tomar posición y comprometerse con causas justas», dijo Federico Taboada, miembro de la comisión del Cine Wilde, quien también agradeció al intendente Ferraresi porque «si no hubiera tomado el proyecto en sus manos, todavía estaríamos juntando firmas».
Junto a su familia colmada de emoción y con su hijo en brazos, Pablo Echarri destacó el trabajo de la comisión y del intendente en este proyecto.
El actor se mostró profundamente agradecido por esta decisión y destacó la tarea que viene haciendo el gobierno nacional a nivel cultural: «que el barrio vuelva a tener su cine es un paso gigantesco en la inclusión cultural». Y agregó: «Siento felicidad porque alguien hayan bautizado así un emprendimiento de vecinos que recuperaron un espacio con una función social muy importante».
Echarri además remarcó que «esto también es gracias al trabajo del intendente que trabaja diariamente por todos los vecinos».
Sobre el homenaje, Echarri señaló: «Lo tomo como un enorme acto de amor. Esto me ayuda a tratar de ser mejor persona cada día».
Emocionado, Pablo Echarri recordó a su padre y contó con sonrisas que se encontró con gente querida, vecinos y clientas de cuando trabajaba como vendedor en un local de ropa del centro de Wilde.
Luego fue descubierta la placa con el nombre de la Sala y fue presentado un video sobre la actividad del Cine Wilde para las instituciones.
Antes de despedirse, el actor presentó la película «La vida es bella», de Roberto Benigni y saludó a los vecinos cálidamente. «Ojalá podamos pasar alguna de mis películas pronto», dijo al saludar. Y salió con su familia entre el cariño de la gente.
Tal como destacaron desde el municipio, en ese mismo espacio recuperado será construida también una sala teatral para 1.200 espectadores.
