La Provincia quiere terminar con las promociones del 2×1 de alcohol y las ofertas de barra libre que habitualmente se observan en bares y boliches, con el objetivo de desalentar el consumo y promover una “nocturnidad más segura”.

La campaña se realizará con la colaboración de la Asociación Empresaria de Hoteles, Gastronomía y Turismo provincial (ASEN), que nuclea a los locales bailables, e incluirá fuertes controles a las fiestas de egresados.

La iniciativa surgió a raíz de la preocupación de las autoridades sanitarias al comprobar, mediante un relevamiento, que el 75 por ciento de los bares y boliches que realizan publicidad a través de las redes sociales promueven el consumo de bebidas alcohólicas mediante distintas promociones como 2×1 y barra libre o al costo en determinado horario.

“Este tipo de publicidad está justamente en las antípodas de lo que la cartera sanitaria viene haciendo, trabajando para desalentar el consumo problemático de sustancias entre los jóvenes, una de las prioridades de esta gestión”, señaló el ministro de Salud, Alejandro Collia, durante la reunión que se realizó ayer con los referentes de los locales bailables nucleados en ASEN. “Por eso, vamos a iniciar una exhaustiva campaña junto a los municipios y a los dueños de los boliches para terminar con estas promociones”.

En territorio bonaerense hay más de 4.700 bares y boliches con licencia activa. En tanto, en lo que va del año, Reba realizó un total de 5.359 inspecciones, no sólo en estos locales sino también en comercios, almacenes y supermercados, y de ese total unos 1.300 fueron infraccionados.

La tarea será coordinada por el Registro provincial de Comercialización de Bebidas Alcohólicas (Reba), dependiente de la subsecretaría de Atención a las Adicciones, y con la colaboración de las autoridades municipales y de los dueños de los locales nocturnos. “En los operativos que llevamos adelante este 2014 secuestramos más de 1.200.000 botellas”, especificó Juan Lauro, director del ente mencionado.

Qué dice la ley

En la Provincia de Buenos Aires existen dos normas que regulan la nocturnidad: la 14.050, sancionada en 2009, y la 11.825, que reglamenta el expendio de bebidas alcohólicas, y que establece, entre otras cosas, la prohibición de la modalidad de consumo denominada “canilla libre”, así como también la realización de concursos o competencias con alcohol y la venta de vasos que superen los 350 ml.

No obstante, “la normativa no prohíbe este tipo de promociones que estamos buscando erradicar, por eso, y como vemos que es una modalidad publicitaria que viene creciendo, queremos frenarla”, explicó Lauro durante la reunión.

La lupa sobre las fiestas estudiantiles

Los festejos de egresados también están en la mira del Reba. Desde el año pasado, el ministerio de Salud encabeza una iniciativa para combatir la venta de alcohol a menores, a través de la confección de un registro voluntario con los datos de las fiestas de egresados y los salones donde se llevarán a cabo. El objetivo es facilitar el trabajo de los inspectores, quienes asisten de manera preventiva en primera instancia, y luego realizan el control el día del evento.

“Sólo el 5 por ciento de estas fiestas se realiza en el ámbito de lo privado, es decir en quintas o casas particulares, esto quiere decir que la gran mayoría restante se desarrolla en bares o boliches, que son alquilados para ese fin”, señaló Lauro. Por eso volvió a pedir la colaboración de los referentes nocturnos para recabar información sobre esos eventos y repetir el éxito de la iniciativa del año pasado.

Además, “promover este registro voluntario nos ayuda para la planificación sanitaria. Nosotros hemos adquirido amplia experiencia en el trabajo con jóvenes y la problemática con el abuso de sustancias. No nos olvidemos que ya tenemos 211 CPA (centros de atención a las adicciones), y un 26 por ciento de quienes se acercan lo hace para iniciar un tratamiento por problemas con el alcohol”, explicó el subsecretario de Atención a las Adicciones, Carlos Sanguinetti.

El trabajo preventivo de las fiestas, en tanto, se complementa con una exhaustiva búsqueda en las redes sociales, de acuerdo a una lista de colegios secundarios, sobre todo del Conurbano y La Plata, donde el año pasado se advirtió una mayor concentración de fiestas. “En caso de que se verifique venta de alcohol, la sanción es para el lugar donde se desarrolla el evento. Por eso si los propietarios de los boliches ayudan en la tarea nos beneficiamos todos”, dijo Lauro.