En Mar del Plata, la ocupación hotelera superó el 85% en promedio y llegó al 100% en los establecimientos de lujo, según operadores turísticos, que destacaron su optimismo respecto de la temporada de verano próxima.

En ese sentido, desde el sector inmobiliario informaron que los visitantes aprovecharon estos días para realizar reservas y consultas con respecto a alquileres.

Mientras la mayoría de los visitantes abandonaba la ciudad por la autovía 2, una fuente del control caminero de Camet dijo que “fue un fin de semana muy normal sin accidentes” en ese trazado, lo que indica que se respetaron los controles de seguridad.

Al Partido de la Costa bonaerense llegaron más de 68 mil personas, que generaron un movimiento económico de 32 millones de pesos, manifestó a Télam su intendente, Juan Pablo de Jesús, para quien “este nuevo fin de semana largo ha sido uno de los más destacados de 2010, detrás del feriado del 12 de octubre”.

Hasta el domingo por la noche, señaló, “se registraba una ocupación de un 58,40% promedio en hoteles de todas las categorías, con un 100% de ocupación en hotelería 4 estrellas en San Clemente y Mar de Ajó, un 84,60% en alojamientos de 3 estrellas en San Clemente”.

En Córdoba, el secretario de Turismo de Villa Carlos Paz, Carlos Azzaretti, afirmó que fue “un fin de semana muy bueno con un 78% de ocupación, a la vez que ha sido cuantioso el caudal de visitantes que llegó a la Villa desde la ciudad de Córdoba capital”.

El presidente de la Asociación Hotelera, Gastronómica y Afines de esa comuna, Hugo Marconi, acotó que “todavía no hemos sacado los números finales pero fue muy positivo para la ciudad. El sector gastronómico trabajó muy bien y el centro se vio muy concurrido”.

En Mendoza, los hospedajes estuvieron ocupados en casi un 70% en toda la provincia, señaló el secretario de Planificación Turística, Raúl Sánchez.

Aunque aún no había números oficiales sobre la cantidad de visitantes, el funcionario dijo que el movimiento no fue tan exitoso como en otros fines de semana largos de este año, pero que el porcentaje mencionado “es una estadística más que buena”.

“Muchos mendocinos viajaron a Alta Montaña, a San Rafael y al Valle de Uco para aprovechar estos tres días”, acotó Sánchez, y agregó que en las zonas de Alta Montaña y en el sur -con los departamentos de San Rafael y Malargüe a la cabeza-, la ocupación en los distintos hospedajes llegó al 80%.

La Asociación de Confiterías, Bares, y Afines de Catamarca precisó que las plazas hoteleras de la provincia estuvieron estos días ocupadas en un 65%.

Fuentes de la Secretaría de Turismo de la provincia indicaron que en el valle central catamarqueño el promedio de ocupación osciló entre el 65 y 70%, mientras que en el interior, con menos plazas turísticas, superó el 85%, como en las Termas de Fiambalá.

En Entre Ríos, las ciudades de los circuitos termales de los ríos Uruguay y Paraná fueron la gran atracción del fin de semana para los visitantes, dijeron a Télam voceros de la Subsecretaría de Turismo de la provincia.

Según las fuentes, fue un aluvión turístico que se sintió en especial en Federación, Concepción del Uruguay, Colón, Chajarí, Villa Elisa, Concordia, La Paz, Victoria y María Grande.

La mayor cantidad de reservas de alojamiento correspondió a visitantes de Buenos Aires, Rosario, Santa Fe, Córdoba y de la República Oriental del Uruguay.

El movimiento del fin de semana en Jujuy lo protagonizaron visitantes regionales, en especial de Salta, Tucumán, Catamarca y Santiago del Estero, se informó en la Secretaría de Turismo y Cultura de la Provincia.

El presidente de la Cámara de Turismo de la provincia, Joaquín Carrillo, dijo a Télam que “se está imponiendo el turismo regional durante los fines de semanas largo”.

En este feriado, expresó, “hubo una alta ocupación” hotelera en especial el norte Jujeño, como la Quebrada de Humahuaca, además de “otros circuitos dentro de la provincia”.

En La Pampa hubo una dispar demanda hotelera, de acuerdo al relevamiento efectuado ayer por la mañana por Télam en los principales hoteles de Santa Rosa.

Mientras en un hotel ubicado en las afueras de la ciudad la reserva fue del 100%, en el resto de los hoteles capitalinos osciló entre el 30 y el 50%.

Según responsables de los hoteles consultados, fue un fin de semana largo más que tranquilo, las camas no se cubrieron en su totalidad y la gente fue más que nada turista de paso por uno o dos días.