«Brian Castillo tenía 18 años. Era estudiante de la EET Nº 7 de Avellaneda, en 2do año BIES, Turno Mañana. A la noche trabajaba como repartidor de delivery de sushi en Puerto Madero en la Ciudad de Buenos Aires. La noche del 2 de noviembre de 2010 un adulto, irresponsable, alcoholizado, que conducía un BMW como dueño de la calle, lo atropelló en Estados Unidos y Azopardo. Intentó huir, sobornar a la policía y no socorrió a Brian. Un semáforo, una ambulancia y herramientas para la emergencia quizás hubieran salvado su vida. Pero Brian murió. Este adolescente, estudiante y trabajador, no fue noticia».

Su familia invita a llevar una vela para encender todos juntos ese día.