El joven Julián Boccuzzi volvió a demostrar su talento y esta vez le sirvió para consagrarse campeón del mundo por equipos en el certamen que se diputó días atrás en la ciudad de Mar del Plata.

“Su camino hacia la Copa del Mundo 2024 en Mar del Plata estuvo marcado por una preparación intensa, un compromiso inclaudicable y el apoyo invaluable del padre Gabriel”, sentenció su entrenador Cristian Mayo.

Dedicación, concentración y espíritu de equipo son algunas de las características que llevaron a Boccuzzi a este gran presente, no solo en las competencias individuales, sino cuando en conjunto hay que pelear por un logro superior.

“En la competencia, Julián demostró su talento y entrega. En su primer turno, logró una destacada actuación, lo que le permitió acercarse a la posibilidad de una medalla”, comentó Mayo a La Ciudad, agregando que “en el segundo día, en la categoría de combate, se alzó con su primer título mundial, obteniendo el tercer puesto ante rivales de gran nivel”.

El cuarto día fue el más importante para Boccuzzi, porque fue el día de su consagración. Su primera experiencia internacional en la Copa del Mundo fue un rotundo éxito y aportó su talento y perseverancia para que su equipo se llevara la tan ansiada Copa del Mundo.

“Estamos orgullosos de Julián y de su camino hacia la cima. Su historia es una inspiración para todos nosotros. Esperamos que siga cosechando éxitos en el futuro”, sentenció su entrenador, Cristian Mayo.