Para trabajar colectiva y colaborativamente temáticas regulatorias relacionadas con la elaboración de alimentos, la referente de Agricultura Familiar del Centro Regional Buenos Aires Sur del Senasa, Adela Surigaray convocó a un encuentro que contó con la presencia del director regional, Manuel Baldovino, el representante de la Dirección Provincial de Productos Alimenticios (DIPA) del Ministerio de Desarrollo Agrario (MDA) de la provincia de Buenos Aires, Jorge Taylor; la directora de Fortalecimiento Organizacional y Ordenamiento Territorial del MDA, Nadia Dubrovsky y la coordinadora de Agricultura Familiar (CAF) del Senasa, Lucía González Espinoza.

“Hay una necesidad bien clara y manifiesta en el sector para que se pueda permitir que determinados productores/as y producciones se elaboren a nivel domiciliario”, indicó Roberta Sammartino, de la CAF del Senasa.

La propuesta de cocinas domiciliarias busca incorporar en el CAA un nuevo articulado que las autorice como pequeñas unidades productivas o cocinas fábrica de alimentos artesanales o tradicionales, para la elaboración y/o comercialización de determinados productos listados. Asimismo, se incluiría la definición de cocinas domiciliarias y las especificaciones, y las limitaciones para su autorización y/o habilitación.

La reunión fue convocada con la intención de difundir en el territorio del Centro Regional el contenido de la propuesta de inclusión normativa, y obtener las opiniones de los actores que durante los últimos años han acompañado los proyectos de elaboración de alimentos en el ámbito domiciliario, en el marco de las ordenanzas municipales vigentes y la resolución de las Pequeñas Unidades Productivas Alimenticias (PUPPAs) aprobada por el MDA en el año 2020.

La propuesta que se presentará a la Comisión Nacional de Alimentos (CONAL) permitiría ampliar el alcance en la comercialización de estos productos y avanzar en políticas que fortalezcan las producciones de la agricultura familiar, campesina e indígena con herramientas para la visibilización y formalización del sector, acompañamiento técnico y marcos regulatorios acordes a la escala de producción.

Desde el MDA, Taylor explicó el funcionamiento y el surgimiento de la PUPPAs que se encuentran consolidadas en la normativa provincial: “Contamos con un total de 314 PUPAAs habilitadas en toda la provincia, que cubren 85 municipios. Eso significa más del 60% de todo Buenos Aires”, dijo.

En este sentido, Silvia Reinoso, elaboradora de barritas de cereal y galletitas de la zona de Mar del Plata, señaló que su emprendimiento se encuentra “dentro del programa de PUPAA provincial, que junto con las técnicas del INTA y el INAFCI nos acompañan en nuestro crecimiento. Y nos brindan ideas de cómo seguir nuestras construcciones para llegar a otros objetivos a futuro”.

Para finalizar, Surigaray señaló que “durante la reunión se hizo hincapié en la importancia que reviste esta propuesta para la soberanía alimentaria y el derecho al trabajo digno y al comercio lícito, todos conceptos fundamentales a la hora de avanzar en el apoyo a estas normas que amplían la inclusión de los sectores que más asistencia requieren, y que además con responsabilidad y compromiso elaboran y ofrecen alimentos sanos y nutritivos a precios justos”.

También estuvieron presentes representantes de distintas Agencias de Extensión Rural del Centro Regional Buenos Aires Sur (CERBAS) del Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA), referentes del Instituto Nacional de Agricultura Familiar, Campesina e Indígena (Inafci) local, del Instituto de Tecnología Industrial (INTI), de Cambio Rural, de los municipios de Mar Chiquita y General Alvarado, del MDA, del Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas (CONICET) y de la Universidad Nacional de Mar del Plata (UNMDP), así como elaboradores y elaboradoras locales y organizaciones de la agricultura familiar, campesina e indígena, y agentes de la sede central de la CAF y del equipo territorial de Agricultura Familiar de la sede marplatense del Senasa.