Vinculado a los recientes aumentos proyectados para los servicios públicos, en el informe universitario se vislumbra que en 2018 se destinó un 6% menos que en 2015 al gasto social y a los subsidios económicos sobre los servicios públicos. “La política de reducción de los subsidios a las tarifas de servicios públicos continúa su marcha junto con la dolarización de las mismas. Se observa que en 2019 los mismos alcanzarán el 4,1% del PBI. Particularmente se destaca la caída en los subsidios a la energía, que bajan del 1,4% al 1,1%, y los del transporte que lo hacen desde un 0,7% hasta el 0,4% en 2019. En menor medida bajan los subsidios para asistencia social, ante la evidencia que el proceso creciente de ajuste y recesión ocasiona graves consecuencias para los sectores populares y medios, con lo cual la política de promoción y asistencia social se hace indispensable aunque escasa para contener los avances de la crisis”, apunta el documento de la Universidad Nacional de Avellaneda. |