En ese sentido, Lugones informó que en el acto estaban “los más conocidos de la barra” del club de Avellaneda y cuestionó que se haya tomado a “la barra como un sistema de contratación, pensado para reemplazar a las fuerzas de seguridad que tenían que estar en el acto”.

Según el titular de la Aprevide, lo más “singular” fue un evento “en el que no se quería fuerza policial pero sí a la barra brava de Racing custodiando la seguridad de un acto”, y se refirió a los integrantes de la barra brava como “el sector más violento de los grupos de Avellaneda. En provincia de Buenos Aires tenemos que controlar no sólo lo que pasa adentro de una cancha. El objetivo de la gobernadora María Eugenia Vidal es luchar contra las mafias vengan de donde vengan y, en este caso, las mafias del fútbol que son los barrabravas, así que estamos controlando que es lo que hacen”, subrayó.