El paro en los subterráneos se extendió otras 24 horas

El paro que mantiene paralizados desde hace una semana los subterráneos y el Premetro se prolongará este sábados, sábado, por octavo día consecutivo, al fracasar las negociaciones en la Subsecretaría de Trabajo porteña entre los metrodelegados y la empresa Metrovías, concesionaria del servicio.

El delegado del gremio de subterráneos, Néstor Segovia, anunció que “el paro general en las seis líneas de subterráneos y el Premetro se prolongará durante otras 24 horas, por lo menos, ya que la empresa Metrovías admitió no tener dinero para hacer frente a los reclamos de mejora salarial, por lo que debería dar un paso al costado”.

Luego de una nueva y extensa reunión entre las partes mantenida ayer, Segovia calificó a los directivos de la firma concesionaria del servicio como “unos chantas” y aseguró que el encuentro fue “un rotundo fracaso”, por lo que ratificó el paro para este sábado.

“La empresa no realizó aún una oferta concreta de mejora salarial para generar las condiciones que permitan levantar la huelga”, sostuvo Segovia, quien desmintió también que la Unión Tranviarios Automotor (UTA) ya haya firmado un acta-acuerdo de aumento.

Sin embargo, el titular de ese gremio, Roberto Fernández, ratificó que la UTA acordó anoche una recomposición del 23 por ciento, por lo que acató la conciliación obligatoria.

Las partes se reunieron otra vez en la Subsecretaría de Trabajo de la ciudad, encabezada por su titular, Ezequiel Sabor, quien anoche había dictado una conciliación obligatoria que no fue acatada por los huelguistas.

“Se llegó al séptimo día de un conflicto, que continuará por lo menos hasta mañana, provocado por la negativa del gobierno de la ciudad a funcionar como autoridad de aplicación. Metrovías tuvo una actitud dilatoria que no demostró a la hora de percibir un aumento tarifario. La estructura gremial de la UTA cerró filas con empresa y gobierno, sin pensar en los trabajadores”, afirmó hoy un comunicado de prensa firmado por Segovia y Roberto Pianelli, titular de la Asociación Gremial de Trabajadores del Subte y Premetro (metrodelegados).

Los dirigentes gremiales aseguraron que “el otorgamiento de la personería gremial al sindicato de subterráneos es indispensable”.

También indicaron que “Metrovías es insolvente y las autoridades no se hacen cargo”, y reclamaron que “la compañía se ajuste a derecho con los salarios y condiciones laborales y que Subterráneos de Buenos Aires (SBASE) ejerza la concesión”.

El jefe de Gabinete del gobierno metropolitano, Horacio Rodríguez Larreta, había asegurado esta mañana que los delegados, luego del dictado de la conciliación obligatoria, ya “no tienen excusas para no levantar la medida de fuerza”, en tanto el Procurador General de la Ciudad, Julio Conte Grand, había afirmado ser “muy optimista” en torno de la resolución del conflicto gremial.

El jefe de Gobierno porteño, Mauricio Macri, sostuvo anoche el conflicto “no se trata de un problema de recursos sino de la necesidad de imponer a través de muchos hechos claramente demostrados”.

“No se trata de recursos sino de un problema netamente político, porque se están definiendo las condiciones en las que vivirá la sociedad”, señaló Macri.
La Subsecretaría de Trabajo porteña dictó anoche la conciliación obligatoria, luego de una reunión mantenida con la jueza Patricia López Vergara, pero los delegados decidieron hoy desacatarla.

Por su parte, la UTA había reclamado esta mañana a la empresa y al gobierno porteño “garantías” para poner nuevamente en marcha el servicio de subterráneos ante la posibilidad de que se produjeran “peleas” entre los dos gremios representativos del personal.

De forma contraria a lo señalado por Segovia, Fernández aseguró que la UTA alcanzó anoche “un acuerdo salarial con Metrovías, por lo que desde el 1º de agosto se percibirán los salarios con un 23 por ciento de recomposición”, a la vez que calificó el conflicto como “una interna partidaria política”.

Segovia aseguró esta tarde que el cuerpo de delegados y los dirigentes del sector están dispuestos a negociar toda esta noche y mañana para intentar levantar el paro, “si hay propuestas”.

Los delegados explicaron que la paritaria sectorial expiró el 28 de febrero último y reseñaron que en mayo -luego de varias medidas de fuerza con apertura de molinetes y paros progresivos, que incluyó una huelga de 36 horas- se presentó a Metrovías un reclamo de recomposición de los haberes votado en las asambleas.

Los trabajadores exigen a la concesionaria un 28 por ciento de mejora salarial sobre los básicos, los viáticos y los items remunerativos, el incremento de la antigüedad del 1,3 al 2 por ciento y la modificación del régimen de licencias.

Las protestas habían sido suspendidas el 21 de mayo, luego de que la firma ofreció una suma no remunerativa retroactiva a marzo.

A las 21 del viernes 3 de agosto se inició un paro general, que mañana ingresará en el octavo día consecutivo, en demanda de la apertura de una mesa de negociación paritaria.

El fiscal general adjunto de Buenos Aires, Luis Cevasco, solicitó hoy que se investigue a los delegados por mantener “una medida de fuerza sin tener personería gremial” y reclamó una investigación penal contra los dirigentes del gremio de subterráneos.

Cevasco evaluó que la conducta de los delegados podría encuadrarse en el artículo 69 del Código Contravencional de la ciudad, que prevé multas de hasta 5.000 pesos o arresto de diez días para quien afecte de forma intencional “el funcionamiento de los servicios públicos como el transporte”.

El fiscal sugirió también que podrían haber incurrido en el artículo 194 del Código Penal, que prevé prisión de hasta dos años para quien sin crear una situación de peligro común “estorbare o entorpeciere el normal funcionamiento de los transportes”.

“Que sepa el gobierno porteño y sus funcionarios que no nos meterán miedo ni nos presionarán de ninguna forma”, advirtió esta tarde Pianelli.

noticias relacionadas