«Lo que no se animó a hacer el Congreso nunca, y el Ejecutivo tampoco había enviado proyectos de estas características, hoy entre todos hemos dado una lección», dijo el funcionario nacional, en declaraciones a Radio Continental, al referirse a la aprobación de la boda homosexual esta madrugada en el Senado.

Agregó que a partir de la sanción de la ley «hemos reivindicado derechos para una buena parte de la sociedad, que no sólo veían frustrada su posibilidad (de casarse), sino que también sufrían por este tema».

Así, el jefe de Gabinete consideró que «la Argentina se puso a la vanguardia de la discusión y reivindicación de los derechos (de los gays) en Latinoamérica».

«Nosotros fuimos precursores en esa decisión, con la cabeza, con la altura política de gente de todos los partidos políticos porque fueron capaces de levantar su mano para decidirlo», añadió; y recordó que «todos coincidían en que era necesario producir un cambio».

«Acá no había un problema religioso de por medio, lo que estábamos discutiendo era la necesidad de llegar a ese sector, o este segmento, que durante muchos años han sufrido, han padecido esta situación por no tener una reivindicación de sus propios derechos, y hoy encuentra una solución definitiva con la sanción de esta ley por el Congreso de la Nación», completó.

El proyecto resultó aprobado por la Cámara alta durante la madrugada de hoy con el voto positivo de 33 senadores, con 27 en contra y 3 abstenciones.

Consultado sobre las ausencias de algunos legisladores en la sesión y al momento de votar, Fernández dijo que «el sentarse, el votar positivo, el votar negativo, el abstenerse, el no estar, forma parte de una atribución que le es propia a partir del momento que uno es elegido legislador».

«Siempre hay una forma de expresarse por parte del legislador», aseguró el jefe de ministros.