El aprendizaje es un proceso dinámico y permanente

Escribe Andrea Fabiana Varela Seivane.

Cuando hablamos de aprendizaje parece que sólo se hace referencia al aprendizaje sistemático, el aprendizaje escolar, pero debemos tener en cuenta que el aprendizaje abarca más que el aprender sistemático, aprendizaje además es todo proceso de adaptación, en el cual se incluyen las destrezas, las actitudes, los valores y los intereses que se dan dentro y fuera del marco educacional.

Cuando un organismo se enfrenta a una situación y las formas de responder resultan inadecuadas, se hace fundamental implementar una nueva forma de respuestas, y estas nuevas maneras de responder es lo que llamamos aprendizaje. El aprendizaje es un proceso que desemboca en una nueva modalidad funcional del organismo, el aprendizaje es una reorganización de su conducta, es una superación de estructuras anteriores.

El aprendizaje es un proceso que determina una modificación del comportamiento y tiene un carácter adaptativo, y esto se da siempre que las modificaciones de las condiciones del ambiente que lo determinaron hayan sido lo suficientemente estables.

El ser humano aprende desde el momento en que nace, por lo tanto el aprendizaje es permanente y nos muestra que el ser humano siempre tiene la posibilidad de aprender. Aprender es un comportamiento inherente a sí mismo, y no solamente es conocer, sino que además es percibir y comprender, también, el aprender no es solamente la incorporación de datos y hechos ya constituidos, sino que es poder redescubrirlos y reinventarlos por medio de la experiencia personal.

El aprendizaje es un comportamiento que se logra gracias a la característica fundamental que tiene el ser humano, que es su cerebro. El grado de desarrollo cerebral, especialmente el aumento de volumen y complejidad del lóbulo frontal, es lo que le permitió al ser humano llegar a dirigir a voluntad sus movimientos, es lo que hizo posible un lenguaje simbólico, oral y escrito, es lo que hizo posible la creación de una sociedad y su posterior trasmisión, es lo que hizo posible el desarrollo de actividades religiosas y es lo que hizo posible de manera fundamental la conciencia de su propia existencia.

El aprendizaje también depende de la interacción del organismo con su medio, estos factores del medio incluyen los factores nutricionales, los factores afectivos, los factores sociales y los factores que se relacionan con la cantidad y calidad de estimulación que el niño recibe, y lleva a constantes reorganizaciones del comportamiento.

El sistema nervioso central es el que le permite al ser humano la conducción y construcción de las distintas modalidades de adaptación a su entorno, las habilidades para usar el lenguaje, para leer, para escribir y para resolver cálculos, se dan gracias al resultado de funciones bioquímicas dentro del sistema nervioso.

El ser humano va en busca de placer, trata de evitar el dolor, buscando siempre reducir la tensión que le provocan esas necesidades, y es justamente ahí cuando debe reorganizar su conducta y ponerse en acción, es decir, comenzar su propio proceso de aprendizaje. La construcción del sistema nervioso central y su organización, está preparada para que pueda darse como sistema abierto, como la realización de su propio programa para disponer de un modelo personal del mundo.

Esta construcción del sistema nervioso central puede quedar detenida cuando queremos imponer nuestro modelo ante el otro, cuando no le permitimos a este otro realizar su experiencia, o cuando ese otro enferma y sus funciones superiores ya no pueden responder para que pueda mantener su autonomía.

La constitución del ser humano no es estática, sino que es dinámica y cambiante, es el resultado del potencial genético, y que está influenciado por factores tanto familiares, como por factores ambientales, anteriores y presentes. Entender que la constitución del ser humano es dinámica, implica considerar en el proceso lo biológico, lo psicológico y lo social, esta visión integral, holística de la constitución del hombre, permite describir, comprender y definir al siendo humano como totalidad al momento de analizar el proceso de aprendizaje.

El aprendizaje al ser un proceso permanente, puede verse alterado en cualquier momento del desarrollo, y es indudable que cuando el aprendizaje se detiene en los primeros meses de vida o en sus comienzos, se producen alteraciones significativas, y se ven afectadas la estructuración y organización biológica, psicológica y social.

Licenciada en Psicología
Andrea Fabiana Varela Seivane
MN 34156
Consultas al 4205-0549 155-143-6241

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