El Dr. Jorge Carlos Trainini, principal autor del libro Fulcro y torsión del miocardio helicoidal, ha atendido a iSanidad tras el acto de presentación de este trabajo en la Real Academia de Ingeniería. «Es una investigación traslacional que salta las fronteras de los países, las disciplinas médicas y la medicina hacia la ingeniería», indica el reconocido cirujano cardiovascular. Además, es profesor honorario de la Universidad de Avellaneda (Buenos Aires) y fue director del Hospital Presidente Perón durante varios años. Hace tres años el Dr. Trainini ya elaboró junto a su equipo el libro Torsión miocárdica: investigación anatomofuncional, sobre anatomía y función cardiaca.

El libro Fulcro y torsión del miocardio helicoidal recoge los resultados de una investigación que concluye que el corazón está formado por un único músculo miocárdico que se enrolla sobre sí mismo, confirmando la teoría del cardiólogo español Francisco Torrent Guasp. Además, el trabajo señala que el corazón no es una bomba de impulsión, como se ha considerado hasta ahora, sino de impulsión y succión. Así, el corazón, en vez de 2 fases (sístole y diástole) tiene 3 fases (sístole, succión y diástole). Las diferentes partes del libro se han publicado en revistas de prestigio científico sujetas a revisión por pares. El Dr. Jorge Trainini desvela las principales novedades que aporta libro.

El libro Fulcro y torsión del miocardio helicoidal concluye que el corazón, en vez de 2 fases (sístole y diástole) tiene 3 fases (sístole, succión y diástole)

¿Cuáles son las principales conclusiones del libro?
Las principales conclusiones son, primero, que el corazón es un músculo enrollado sobre sí mismo que conforman los dos ventrículos. Segundo, que el músculo para poder ejercer su función de enorme importancia y fortaleza al dar energía se apoya en un soporte que hasta ahora no había sido descrito y lo denominamos fulcro cardíaco. El músculo en su inicio y en su fin se apoya en él, se inserta, y es lo que le permite ejercer la fuerza para su función. Tercero, que las capas al rotar, torsionarse y estrujarse como una toalla para poder expulsar la sangre y desestrujarse, se friccionan unas sobre otras y encontramos un elemento lubricante que es el ácido hialurónico.

Otra situación que hemos encontrado es que todo esto conforma un corazón que no tiene como siempre creímos sístole y diástole, hay una fase intermedia. Sin esa fase que es la de succión el corazón no podría funcionar porque es una fase activa. Es la única fase negativa durante toda el acto circulatorio, ya que permite atraer la sangre de la periferia y enviarla después a la circulación. Todo esto está corroborado a través de la ecocardiografía y la resonancia magnética nuclear.

Dr. Jorge Trainini: «El músculo para poder ejercer su función de enorme importancia y fortaleza al dar energía se apoya en un soporte que hasta ahora no había sido descrito y lo denominamos fulcro cardíaco»

También hemos desarrollado cálculos energéticos porque el corazón, al ser como una bomba, tiene una expulsión y una succión que es una energía global. Nosotros medimos hasta ahora cuestiones parciales como la fracción que expulsa, pero no la energía total del corazón. Esto también puede ser un cambio trascendente cuando esté establecido en la clínica.

¿Qué nuevos campos puede abrir este trabajo?
La investigación abre campos en la terapéutica a nivel de medicamentos. Habrá que desarrollar ecocardiógrafos y resonadores más específicos para medir la torsión, la succión y la energía cardíaca. También abre campos específicos en la cirugía cardiaca (donde ya se está aplicando) y en los marcapasos. Hay unos marcapasos especiales que se usan en insuficiencia cardiaca que son los resincronizadores. Estos marcapasos antes se colocaban en lugares incorrectos, con lo cual entre el 50% y el 60% de la población no tenía mejora. Colocándolos en el sitio donde la banda muscular permite la torsión se ha visto que no hay prácticamente fallos.

«Colocando los resincronizadores en el sitio donde la banda muscular permite la torsión se ha visto que no hay prácticamente fallos. Antes se colocaban en lugares incorrectos, con lo cual entre el 50% y el 60% de la población no tenía mejora»

¿Qué importancia tiene la multidisciplinariedad en este trabajo?
La multidisciplinariedad se consigue a través de unir disciplinas no solamente médicas e ir a la ingeniería. El corazón es un órgano biológico en su estructura, pero su funcionamiento es profundamente físico, hidráulico. Estas dos cosas obviamente dan un conocimiento superior. Se empieza a entender el funcionamiento del corazón desde un punto de vista de los cálculos energéticos y de la ingeniería porque es una máquina hidráulica.

Por Pablo Segura para ISanidad