De la mano de “Súper Mario”

Italia derrotó a Inglaterra 2 a 1 con goles de Marchisio y Balotelli, uno en cada tiempo por la primera fecha del Grupo D. Sturridge había igualado transitoriamente el marcador en la primera etapa.

Claudio Marchisio abrió el marcador para Italia a los 34 minutos del primer tiempo y Daniel Sturridge igualó para Inglaterra dos minutos después, mientras que Mario Balotelli, a los 5 del complemento, puso cifras definitivas en este cotejo jugado en el estadio Arena Amazonia de Manaos, colmado por unas 42 mil personas.

Italia, campeón en 1934, 1938, 1982 y 2006, trepó a lo más alto de las posiciones junto a la sorprendente Costa Rica, vencedora hoy venció por 3-1 de Uruguay, que se alzó con los títulos en 1930 y 1950, pero quedó en el fondo de la tabla con Inglaterra.

El partido, jugado en el norte de Brasil con una sensación térmica por encima de los 30 grados, tuvo un desarrollo muy táctico con una Italia que se adueñó del balón en el primer tiempo aunque con mayoría de toques intrascendentes, y una Inglaterra que esperó desde tres cuartos pero mostró mayor vértigo en el ataque.

En tanto, en la segunda etapa los británicos salieron con otra mentalidad y le disputaron la posesión en el inicio, pero el gol de Balotelli le simplificó el juego a los de la `Bota`, que se cerraron bien en defensa y concretaron una muy valiosa victoria.

El conjunto “azzurro” tuvo en su capitán, Andrea Pirlo, de 35 años, que afronta su tercera Copa y ya fue campeón en 2006, al hombre clave porque jugó con los pies y sobre todo con la cabeza, para asistir por ejemplo sin tocar la pelota, al dejar pasar el balón entre las piernas, para la apertura del marcador.

Mientras que para los “blancos”, el histórico Wayne Rooney, de 28, fue el mejor de su equipo ya que se destacó con una asistencia perfecta y algunos arranques individuales, pero sigue sin poder convertir en lo que también es su tercer Mundial y no pudo evitar la derrota de su seleccionado.

El inicio del partido mostró a dos equipos cuidándose mucho y con estrategias claramente definidas por los entrenadores: Césare Prandelli, de Italia, y Roy Hogdson, de Inglaterra. Y por eso el juego estuvo muy trabado en la mitad de la cancha y solo a través de la media distancia generaron peligro contra los arcos.

Recién pasaron 23 minutos para la primera jugada colectiva del lado de los británicos, con una entrada por derecha de Danny Welbeck que salvó en el área chica Andrea Barzagli -otro de los campeones del mundo de 2006 en cancha al igual que Daniele De Rossi (Gianluigi Buffón estuvo en el banco)-.

Por su parte, Italia tardó más de media hora para llegar a fondo con un cabezazo que pifió Balotelli y luego vino la jugada preparada del córner que derivó en la apertura del marcador: toque corto para Antonio Candreva que se la pasó a Pirlo, aunque este abrió las piernas para que Marchisio convirtiera desde afuera.

Sin embargo, la alegría duró poco porque, apenas dos minutos después, Rooney desbordó por izquierda y puso un centro perfecto para que Sturridge defina solo en el segundo palo ante el mal cierre del argentino nacionalizado italiano Gabriel Paletta.

No hubo mucho más en el primer tiempo salvo otra genialidad de Pirlo para habilitar a Balotelli, quien no pudo definir porque se quedó sin ángulo y probó sin suerte por arriba, y un disparo de Candreva que se estrelló en el palo de Joe Hart.

En la segunda etapa, Inglaterra salió a pelearle el dominio del balón, aunque Italia rápidamente se encontró con un gol tranquilizador tras un centro cruzado de Candreva que Balotelli, quien estuvo ausente en casi todo el partido, cabeceó con claridad por atrás para enviar el balón al fondo de la red.

El conjunto del Reino Unido sintió el golpe y se adelantó en la cancha, pero careció de ideas para penetrar la defensa rival y solo buscó en reiteradas ocasiones desde afuera del área con disparos que hicieron lucir al muy seguro arquero Salvatore Sirigu.

Italia se valió de su histórica solidez defensiva para impedir el ingreso de su rival y hasta pudo haber ampliado ventajas con un tiro libre que Pirlo, figura del partido, estrelló en el travesaño.

Así, los `azzurros`, que venían de su peor actuación en Sudáfrica 2010 con eliminación en primera ronda, coronó un exitoso debut para sumar además su segunda victoria en dos partidos ante Inglaterra por mundiales, porque antes le habían ganado por 2-1 en la puja por el tercer puesto del certamen que organizaron en 1990.

En cambio, los británicos tendrán que jugarse su ilusión de clasificar a octavos de final el próximo jueves cuando se midan ante Uruguay en San Pablo, en otro duelo entre campeones del mundo, aunque en este caso el que pierda le dirá adiós a Brasil 2014.

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