Cristina Kirchner «A cualquier político le gustaría dar no el 82% a los jubilados, sino el 100»
La presidenta Cristina Fernández de Kirchner aseguró ayer acerca del proyecto de la oposición, de otorgar un aumento del 82% móvil a las jubilaciones que «a cualquier político le gustaría implementar no el 82% móvil para los jubilados, sino el 100%».
En declaraciones a la prensa al retirarse de la planta de la empresa SAP en Vicente López, la presidenta que «el principal problema que tenemos es que la oposición carece de proyectos políticos y económicos» y que advirtió «hay gente que habla de que no somos un gobierno progresista, mientras están sentados en la misma mesa de los que dicen que hay que enfriar la economía».
La presidenta Cristina Fernández de Kirchner calificó de «aquelarre» a los representantes de la oposición que piden subir las jubilaciones mínimas, al reiterar que la propuesta «no tiene sustentabilidad».
Dijo que esos sectores «que van desde la izquierda hasta la derecha» impulsan «proyectos para desfinanciar al Estado», pidió a los dirigentes de la oposición «mejorar la calidad política» y advirtió que «no podemos llevar a la fundición ni defaultearla nuevamente a la Argentina».
«Cuando se mezcla los que dicen que somos un gobierno no progresistas, con otros que nos dicen que somos de izquierda, estamos ante un aquelarre, no ante un sector político sólido que podía llegar a proponer un modelo alternativo», sostuvo la jefa de Estado, al hablar tras un acto en la localidad bonaerense de Vicente López.
La jefa de Estado juzgó que estos sectores «no tienen programa alternativo, ni económico ni político» y los instó a explicar a la sociedad «de dónde sale el dinero» para costear el aumento para las jubilaciones, al advertir que «no es sustentable» y remarcar «a cualquiera le gustaría implementar no el 82% móvil para los jubilados, sino el 100%».
«Nosotros no tenemos una actitud mezquina porque se trate de un proyecto de la oposición si es que le sirve a la sociedad. Pero no podemos llevar a la Argentina a la fundición ni defaultear nuevamente a la Argentina», aseveró.
También cuestionó a los dirigentes que pedían enfriar la economía para controlar la inflación. «Menos mal que no enfriamos la economía en 2008, porque el 2009 nos encontraba enfriados hoy estábamos todos congelados», ironizó.
La jefa de Estado sostuvo que «si hemos acertado y ellos se equivocaron, no sería bueno que alguno reconociera que se equivocó».
«Tenemos que mejorar la calidad política, no puede ser que todo esté mal. No puedo formar parte del partido del ‘no’ permanente», sentenció.
Previamente, durante el acto de inauguración de las oficinas de la empresa SAP, la Presidenta exhortó al Congreso a tratar la reforma de la ley de Promoción del Software y, con ironía, aseguró que si bien «tarde un poco porque (los legisladores) están ocupados en otras cosas», su Gobierno apuesta a que «se van a acordar de las cosas que son importantes».
Por otra parte, al destacar la «recuperación del superávit financiero», la mandataria volvió a atacar a la prensa al recordar que «sectores muy pequeños, pero muy volcados a difundir malas noticias o a cambiar la información para que parezca malo lo realmente positivo», subrayaban la carencia de ese indicador y «nos lo restregaban por la cara».
Asimismo, al manifestar que los datos de la economía «son sólidos», dijo que los argentinos “hemos aprendido con letras de sangre” que la crisis «termina llevándose puestos» a los ciudadanos, pese a que «algunos pensaron que si a ellos le iba bien, a los otros les podía ir mal, total a ellos no los tocaba».
Acompañada de ministros nacionales, el intendente de ese distrito del norte del conurbano, Enrique García, funcionarios del gobierno bonaerense y representantes de esa compañía, la Presidenta destacó el acompañamiento del Estado al sector «con políticas muy activas» como la «ley de Promoción del Software, que la hemos perfeccionado».
«Hemos enviado un proyecto de ley de reforma de nuestra propia ley al Congreso para que la trate», recordó y deslizó: «Por ahí tarda un poco porque (los legisladores) están ocupados en otras cosas, pero apostemos a que se van a acordar de las cosas que son realmente importantes».
Asimismo, Fernández de Kirchner subrayó la labor que está realizando el ministerio de Trabajo junto al sector para diseñar una ley que contemple «las nuevas formas de trabajo» que han surgido en la Argentina, como esta, dijo, dedicada al desarrollo del software.