En una conferencia de prensa ofrecida ayer en la sede del partido Convergencia de Izquierda, Amarilla ratificó su declaración ante la justicia y complicó aún más la situación de Favale, el hincha del club Defensa y Justicia sindicado como el autor material del crimen de Ferreyra.

“Era Favale, yo lo vi”, dijo a los periodistas Amarilla, flanqueado por Oscar Castro, Juan Carlos Beica y Alfredo Peñalba, dirigentes de Convergencia de Izquierda, una agrupación que aportó militantes para la protesta de los tercerizados durante la cual ocurrió el homicidio.

Amarilla explicó que ante la jueza Wilma López y la fiscal Cristina Caamaño ratificó que Favale “es el culpable”.

A su lado, Beica explicó que habían decido hacer pública la declaración de Amarilla “para protegerlo” porque temen por su vida.

“Hay intimidaciones y por eso queremos defenderlo y responsabilizar a las autoridades de lo que nos pueda pasar”, añadió el dirigente.

Amarilla aseguró además que la policía “liberó la zona primero para dejarlos pasar y después para cubrirlos”, en alusión a los manifestantes de la Unión Ferroviaria con los que se movilizaba Favale.

El hombre contó también que perdió la noción de “cuántos tiros se escucharon ese día” pero afirmó que el segundo de los disparos fue el que mató a Ferreyra.

El testigo describió a Favale como uno de los tiradores al señalar: “Me quedó grabado, medía 1,60 o 1,70, era morrudo, con pelo corto tipo policía, tenía barba candado y vestía ropa oscura”.