El pasado miércoles se llevó a cabo en el estadio de Obras Sanitarias el Congreso Nacional del Partido Justicialista, donde finalmente fue conformada la Junta Electoral para la elección de autoridades partidarias, previstas para el 8 de mayo próximo.

 
Allí, con la participación de casi 900 congresales, más allá de las coincidencias previas relacionadas con la búsqueda de una lista de unidad, quedaron claramente evidenciadas las dos posiciones internas que por estos días se debaten en el seno del peronismo. Una de ellas, expresada por sectores llamados “dialoguistas”, que aducen priorizar la “gobernabilidad” y acompañar algunas políticas impulsadas por el Gobierno Nacional, y otra, claramente identificada con los lineamientos del modelo político, social y económico que sostuvieron los gobiernos de Néstor Kirchner y Cristina Fernández de Kirchner.

 
En esta última postura se posicionó con firmeza el intendente de Avellaneda y presidente del Partido Justicialista local, Jorge Ferraresi, quien durante el Congreso partidario aseguró que “hace 70 años la consigna era Braden o Perón, y hoy estamos frente esa misma consigna: fondos buitre o Argentina”, expresó.
Ante el aplauso de numerosos sectores de militantes, Ferraresi señaló: “Queremos que de este Congreso salga una posición bien clara en contra del endeudamiento de la Argentina y que los legisladores se sometan a la voluntad del Partido Justicialista y no se vote la derogación de la ley Cerrojo”, reclamó, en referencia a la norma vigente que impide que vuelva a abrirse el proceso de canje de deuda con los llamados “holdouts”. La derogación de esa norma fue expresamente pedida por el juez estadounidense Thomas Griesa para habilitar a la Argentina a acordar con los fondos buitres y volver a tomar deuda.
“Tenemos la certeza que endeudar otra vez a la Argentina es entregarla nuevamente y esa irresponsabilidad del Gobierno neoliberal no se puede acompañar”, subrayó el intendente de Avellaneda a la prensa, una vez finalizado el Congreso.
El presidente de la bancada del Frente para la Victoria en el Senado, Miguel Pichetto, uno de los referentes de los sectores dialoguistas, rechazó de plano la posibilidad de someter la posición legislativa a lo que se definiera en la reunión partidaria de Obras Sanitarias.
“Vamos a actuar en el marco de un acuerdo político de gobernabilidad para sacar al país del default, lo que tiene que ser una tarea de todos los argentinos, no de un sector político y por lo tanto no voy a votar esa propuesta”, expresó Pichetto.
La interna peronista está desatada y, al parecer, la unidad cada vez más lejos.