“Creemos y estamos convencidos que la fiscalía nos acompañará mañana en su alegato, por el peso histórico que tiene la causa, por la condena social que existe, y por tratarse de un crimen social”, dijo Pablo Ferreyra, hermano de Mariano, en declaraciones a Télam.

Pablo consideró que el Estado, a través de la procuradora general de la Nación, Alejandra Gils Garbó, “reforzó” la investigación al nombrar a los fiscales Carlos Gamallo y Mariano Domínguez, y señaló que esta medida “fortaleció la causa”, y se empezó a hablar de “quienes fueron los instigadores” del crimen, en vez hacerlo solamente de “lo que sucedió en Barracas”.

El crimen de Ferreyra ocurrió el 20 de octubre de 2010 en el barrio porteño de Barracas, cuando su partido acompañaba una protesta de trabajadores tercerizados del ex ferrocarril Roca que reclamaban por despidos y su pase a planta permanente.

El abogado del Centro de Estudios Legales y Sociales (CELS), Maximiliano Medina, quien representa a la familia de Ferreyra, aseguró también en diálogo con Télam que espera con “expectativa” la posición que tome mañana la fiscal María Luz Jalbert, en su alegato ante el Tribunal Oral en lo Criminal 21.

El martes de la semana pasada, el CELS pidió en su alegato prisión perpetua para 14 de los 17 acusados, entre los que se encuentran Pedraza y su segundo Juan Carlos “Gallego” Fernández como instigadores, y el resto como co-autores.

Los acusados en este juicio son, además de Pedraza y Fernández, los delegados Pablo Díaz y Claudio Arcocel, los ferroviarios Salvador Pipitó, Juan Carlos Pérez, Jorge González y Guillermo Uño, y los barrabravas Cristian Favale y Gabriel Sánchez, acusados de hacer los disparos que mataron a Ferreyra y lastimaron a los heridos.

También los comisarios de la Policía Federal Hugo Lompizano, Luis Mansilla y Jorge Ferreyra, los subcomisarios Rolando Garay y Luis Echavarría, el principal Gastón Conti y el agente David Villalba, acusados de liberar la zona para el ataque de los ferroviarios.

El CELS no pidió perpetua para Pérez y Uño, encargados de acopiar las armas, sino que solicitó al tribunal cuatro años, en tanto que para el policía Villalba pidió también una pena menor por considerar que estaba en un escalafón muy bajo de la policía y no tenía responsabilidad en la liberación de la zona que se dio ese 20 de octubre del 2010.

La audiencia de mañana comenzará a las 9.30 en los Tribunales de Comodoro Py, y se espera que se extiende durante toda la jornada.

Por su parte, en diálogo con Télam, María del Carmen Verdú, abogada de la Coordinadora contra la Represión Policial e Institucional (Correpi), representante de dos de los heridos que sobrevivieron el ataque en la estación de trenes de Barracas, señaló que esperan que la fiscalía también los acompañe en el pedido de pena.

Según explicó Verdú, en el alegato del último viernes pidió para todos los 17 acusados del debate 25 años de cárcel.

Verdú, quien representa a los sobrevivientes Elsa Rodríguez y Nelson Aguirre, aclaró que la Correpi solicitó que se condene a los acusados por la tentativa de homicidio de sus representados, y no puede pedir prisión perpetua por el homicidio de Ferreyra.