“Con cáncer o sin cáncer nadie podrá evitar la gran victoria patriótica del 7 de octubre. Ahora más que nunca estamos obligados a triunfar para garantizar la paz de Venezuela”, expresó Chávez en los jardines exteriores del Palacio de Miraflores, abrazado a una de sus hijas, rodeado de sus colaborares, empleados de esa casa de gobierno y los efectivos de su Guardia de Honor.

En la ceremonia, trasmitida por cadena nacional, el jefe de Estado dijo que parte “con el espíritu muy fortalecido por tanto amor del pueblo y manifestaciones de buena fe” y encomendó el cuidado del Palacio a sus empleados, funcionario y su Guardia de Honor, a quienes instó a “defender la independencia del país”.

“En las próximas horas y días lucharé como se lucha por la vida, daré la batalla por la vida. La vida mía es la de ustedes, así que voy a defender palmo a palmo esta vida que es de ustedes”, enfatizó antes de subirse a una camioneta que formó parte de una caravana de autos oficiales que los trasladaron al aeropuerto.

Chávez saludó una y otra vez a la gente apostada a lo largo del camino, asomado por el techo corredizo del vehículo, que tenía una imagen de Jesús pegada en el parabrisas, mientras el mandatario iba acumulando a su alrededor las flores que le iban arrojando.

El presidente mantuvo antes de partir una intensa agenda, cuyo acto central se desarrolló en el Teatro Teresa Carreño de Caracas, también trasmitido por cadena nacional. Allí dio a conocer a los integrantes de su equipo de campaña, que estará comandado por alcalde del municipio Libertador, Jorge Rodríguez.

“Es mi comando de campaña para que sea reconocido por todos y pido para ellos lo mismo. Irreverencia en la discusión, pero lealtad con ellos y con ellas en la acción, coordinación y unidad revolucionaria”, puntualizó el jefe de Estado, quien se explayó luego sobre la nueva lesión que le fue detectada en la misma zona donde se le extirpó un tumor maligno en junio pasado.

“En pocos días sabremos (si la lesión detectada es maligna) y luego el plan de ataque. Si fuera maligno, Dios no lo quiera, habrá que hacer otro tratamiento. Ya los médicos dirán. Ya me están informando cómo sería ese tratamiento”, expuso.

Chávez explicó que de ser maligna la lesión habría que actuar rápido y aseguró que batallará contra todas las dificultades que tenga que enfrentar para ser reelecto el 7 de octubre.

“Ese cáncer lo declaramos, y si es que regresa, escuálido (mote que se dedica a los opositores al chavismo) y como tal será tratado, de manera inclemente y como tal será derrotado. Amén, que así sea”, expresó.

Durante este acto, el presidente advirtió que la derecha opositora, a la que consideró “incapacitada moral, ética y políticamente para gobernar a Venezuela”, seguirá creando rumores sobre su enfermedad, según reportó la agencia de noticias AVN.

El presidente tiene autorización desde ayer de la Asamblea Nacional (parlamento) para ausentarse por tiempo indeterminado, aunque el propio mandatario estimó que estará en Cuba alrededor de cinco días.

La cámara legislativa aprobó la solicitud de forma unánime, con apoyo de los votos de la bancada opositora, que la respaldó haciendo énfasis en que las funciones de gobierno deberían ser asumidas por el vicepresidente, Elías Jaua, durante la ausencia de Chávez, lo que finalmente no prosperó.

De esta manera, no habrá delegación de funciones, situación que llevó hoy al presidente de la Asamblea Nacional, Diosdado Cabello, a advertir que los voceros de la opositora Mesa de la Unidad Democrática (MUD) intentarán revivir la tesis del “vacío de poder” que ese sector utilizó durante el golpe de 2002 para promover la desestabilización.

El mandatario, de 57 años, fue operado en junio del año pasado en Cuba de un tumor en la región abdominal y luego se sometió a un tratamiento con quimioterapia.

En noviembre retomó su agitada actividad política con miras a buscar una segunda reelección en los comicios del 7 de octubre.

Días atrás, confirmó que deberá ser operado tras detectarse una lesión de dos centímetros de diámetro en el mismo lugar donde presentó un tumor cancerígeno en junio y advirtió que “hay altas probabilidades” de que “esa nueva lesión sea maligna”.