Cena show a beneficio de la Parroquia «Nuestra Señora del Carmen»

Será este virenes, en la sede de «Unión de Wilde», sita en la calle Zeballos 6458, con motivo de la celebración de su 75º Aniversario. Allí será presentado a la comunidad el proyecto de restauración de instalaciones y vitrales del templo.

La Parroquia «Nuestra Señora del Carmen» cumple 75 años y los celebrará este viernes a las 21 horas con una cena-show en la sede de «Unión de Wilde», sita en la calle Zeballos 6458, donde se presentará a la comunidad el proyecto de restauración del templo y la recaudación será destinada a dicho emprendimiento.

El proyecto de restauración tiene dos aspectos fundamentales: por un lado la ocasión, porque la parroquia cumple 75 años y eso nos lleva a vivir una año jubilar, y por otro porque el templo tiene signos del paso del tiempo, que hablan de una necesidad de pronta restauración», le explicó a La Ciudad el Padre Fabián Esparafita, cura párroco del lugar.

En ese sentido, Orlando Lodico, miembro del consejo económico de la parroquia, agregó que desde hace tres años se vienen realizando diferentes tipos de arreglos, como la reparación del campanario y la colocación del reloj original, y que en la actualidad se están restaurando los doce vitrales existentes.

«Dentro de lo estructural, la restauración de los vitrales era algo que teníamos que hacer en forma urgente – afirmó el Padre Fabián – seguramente estarán terminados para julio o agosto».

«Hay acciones que son indispensables hacer porque están dentro de la pared y están deterioradas, como cañerías, desagües, filtraciones, humedad y corrosión de los elementos metálicos. Es peligroso además porque mucha parte de la mampostería del templo se ha deteriorado y caído», remarcó Orlando Lodico.

«Si bien el campanario ya está reparado, hay otras partes del templo que necesitan un arreglo – resaltó – hace un mes se cayó una columnita, por suerte en un día que no había concurrencia», relató.

Por otra parte, Lodico informó que han pedido tres presupuestos y que los arquitectos que visitaron el lugar recomendaron una mano de obra especializada, similar a los trabajos realizados en el Colón o en la catedral de Luján.

Con el objetivo de escuchar distintas sugerencias y de reunir los fondos necesarios para afrontar esta inversión, la parroquia convocó a los distintos sectores de la comunidad.

«Estamos evaluando los distintos presupuestos pero aún no decidimos la restauración, estamos en la etapa de reunir opiniones y recaudar fondos, que en principio serán reservados para el proyecto y, en caso de necesitarse, para completar el trabajo de los vitrales», manifestó el cura.

Asimismo, y a modo de agradecimiento para aquellas empresas que desean colaborar con la recuperación de este patrimonio arquitectónico de Wilde, las autoridades de la parroquia hicieron todos los trámites pertinentes para que las donaciones puedan ser deducidas de la Declaración de Impuestos a las Ganancias.

«Dada las características de la parroquia y su construcción, el templo no es patrimonio solo de los cristianos, sino de todos. Wilde ha crecido mucho en estos 75 años y no podemos dejar la parroquia en un estado que no esté de acuerdo con el progreso de la ciudad», aseguró Lodico.

Consultado sobre lo que significa la parroquia para la comunidad, el Padre Fabián citó una frase de Vicente Sauras al colocarse la piedra fundamental: «En tiempos donde se habla tanto de democracia, la casa a los que todos pueden venir, sin importar su condición, es la casa de Dios, el templo».

«A Dios se lo puede encontrar en todos lados, pero sin duda el templo sigue siendo la referencia, para cualquier hombre de buena voluntad, del lugar para encontrarse con Dios», añadió el sacerdote.

Por otra parte, sobre la historia del lugar, el padre Fabián destacó la figura de María Ignacia Eyzaguirre de Urquizú, quien realizó la donación para la construcción del templo, y del Padre Comaschi, su primer párroco. «Se sumaron buenas voluntades y se construyó el templo», sintetizó.

«Eso también nos motivó a esta restauración, porque consideramos el esfuerzo y el trabajo que demandó haberlo hecho. Uno, que no pudo ver cuando levantaron el templo, no puede quedarse de brazos cruzados esperando que se destruya», expresó Lodico.

La parroquia Nuestra Señora del Carmen patrona de Wilde, cumple 75 años y lo festeja convocando a toda la comunidad para que se sumen a la difícil pero placentera tarea de restaurar no solo un punto en encuentro, sino el escenario de muchos momentos importantes de gran parte de los vecinos de Avellaneda.

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