Carrascosa reitera su pedido de prisión domiciliaria en Casación

El viudo Carlos Carrascosa, preso por el homicidio de su esposa María Marta García Belsunce, volvió a pedir el beneficio de la prisión domiciliaria, pero ante el Tribunal de Casación Penal, los mismos jueces que en 2009 lo condenaron a cadena perpetua por el crimen.

Fuentes judiciales informaron a Télam que Carrascosa fue trasladado desde el penal de Campana a los Tribunales de La Plata, donde este mediodía, junto a su abogado Fernando Díaz Cantón, tuvo una audiencia oral ante la sala I del máximo tribunal penal bonaerense.

Dicho tribunal está integrada por los camaristas Benjamín Sal Llargues, Carlos Natiello y Horacio Piombo, que son los mismos jueces que revocaron el fallo del juicio oral de 2007 en el que sólo había sido condenado por el “encubrimiento agravado” del crimen, y lo sentenciaron a prisión perpetua como “coautor del homicidio” de su esposa.

“Es la primera vez que después del fallo condenatorio, Carrascosa estuvo cara a cara con los jueces que lo sentenciaron a perpetua. Pudo transmitirles toda la angustia que significa estar en la cárcel por un crimen que no cometió”, dijo a Télam Díaz Cantón.

El letrado explicó que el viudo realizó un planteo similar al que ya hizo en marzo -pero aún no tuvo respuesta-, ante la Cámara de Apelaciones y Garantías San Isidro, en el que detalló los problemas de salud que padece y les pidió que le otorguen prisión domiciliaria en casa de un amigo, en el country CUBE de Escobar.

Al igual que en aquella exposición ante los jueces de la sala I de la Cámara de Apelaciones de San Isidro, Carrascosa hoy reiteró su inocencia, les dijo que no quería morir en la cárcel, que sufre una “depresión feroz” y que tiene gravísimos problemas vasculares que necesitan una mejor atención fuera de la cárcel.

Además, Díaz Cantón señaló que Carrascosa “aprovechó la oportunidad de estar ante los jueces que lo condenaron injustamente por el homicidio para contarles algunos detalles del segundo juicio oral que hubo por el caso, que cambiaron el panorama de lo que había sucedido en su propio juicio”.

“Carrascosa les contó que en el juicio a sus familiares el médico que hizo la autopsia aseguró que las fracturas que presentaba María Marta en las costillas producto de las maniobras de reanimación eran post mortem”, dijo el defensor.

“Esto es clave -continuó el abogado-, porque significa que tuvieron que haber pasado al menos dos horas entre el momento del deceso y la producción de las fracturas en el momento de la reanimación y eso indica que María Marta fue asesinada cuando su marido aún no había llegado a la casa”.

Díaz Cantón también relató que Carrascosa le contó a los jueces que “Catalina Vargas, la ex empleada doméstica de sus cuñados Bártoli cuyo testimonio fue valorado como clave para su condena, en este segundo juicio reconoció que tenía problemas de memoria por un golpe que sufrió en la cabeza en un accidente de tránsito”.

“Vargas es la testigo que dijo que a las seis de la tarde, cuando terminó el partido Boca-River aquel domingo del homicidio, no había nadie en el living, lo que complicaba a Carrascosa y Bártoli que siempre afirmaron que se quedaron viendo un segundo partido”, explicó el abogado.

María Marta García Belsunce (50) fue hallada muerta el 27 de octubre de 2002 en su casa del country Carmel, de Pilar, con medio cuerpo semisumergido en la bañera, y su marido siempre sostuvo que creyó que se trató de un accidente porque era “muy torpe”.

Sin embargo, una autopsia practicada un mes después comprobó que la mujer había sido asesinada de seis balazos en la cabeza y el viudo se convirtió en el principal sospechoso.

En 2007, el Tribunal Oral en lo Criminal 6 de San Isidro lo condenó a cinco años y seis meses de cárcel por el encubrimiento del crimen, pero lo absolvió del homicidio, en tanto dos años después, el Tribunal de Casación Penal le dio la razón al fiscal de la causa, Diego Molina Pico, y lo sentenció a prisión perpetua como coautor del homicidio.

El fallo fue apelado ante la Suprema Corte de Justicia bonaerense que rechazó el recurso por cuestiones técnicas, pero en marzo último el viudo logró que su condena llegue a la Corte Suprema de la Nación para ser revisada.

En 2011, se realizó el segundo juicio por el caso, en el que el Tribunal Oral en lo Criminal 1 de San Isidro condenó a penas de entre 3 y 5 años de cárcel, por el encubrimiento del crimen, a tres familiares, un médico y un vecino de María Marta que estuvieron dos semanas presos, pero después recuperaron la libertad bajo fianza.

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