Bainox desarrolló su propia máquina para laminar las costuras de los caños

Será la primera en el país de estas características.

Luego de cumplir con los objetivos de certificar con las normas ISO 9001 de calidad de Gestión y la 14.001 de normas ambientales, la empresa Bainox dedicada a la fabricación de tubos de acero inoxidable se abocó este año a terminar con el diseño y fabricación de un laminador de costura.

El proyecto, que está casi en su etapa de implementación, es de vital importancia para sectores como el alimenticio o el farmacéutico, en los cuales, por norma, deben tener determinadas características que sólo le puede aportar este tipo de maquinarias.

“En un caño para la conducción de leche, por ejemplo, no puede haber una costura interna porque en la soldadura se podría acumular microbios o cosas que puedan alterar el producto”, le explicó a La Ciudad el titular de Bainox, Néstor López.
“Entonces, con esta máquina, se lamina la costura y desaparece -agregó- se hace todo en el mismo proceso, mientras se fabrica se va laminando”.

Además, López remarcó que “será la primera máquina de estas características en el país”, con lo que piensan seguir imponiéndose en el mercado con cosas nuevas.
Por otra parte, Bainox también incorporó a su variada gama de ofertas a los caños cuadrados, que actualmente no solo se usan en la industria, sino que además son buscados por arquitectos para decoración y para la construcción de estructuras metálicas.

Cabe destacar que la flamante máquina, al igual que el resto que utiliza Bainox, son fabricadas por sus propios técnicos y profesionales. “Es una manera de cuidar mucho la calidad del producto, porque esa es nuestra cara visible”, remarcó el titular de la firma.

Servicio puerta a puerta
Bainox ofrece un servicio puerta a puerta y con el asesoramiento adecuado. Cuando el cliente se acerca a Méndez 1245, sabe que va a encargar un producto que luego le será entregado en su domicilio.

“Nuestra fórmula para perdurar y seguir creciendo es trabajar a conciencia -remarcó López- tratar de hacer las cosas bien y de solucionarle los problemas al cliente”.
En ese sentido, López remarcó que pese a las situaciones difíciles que plantea el país, Bainox siempre está trabajando en nuevos proyectos y en nuevas máquinas para ofrecerles a sus clientes mejores productos.

Proceso de fabricación
Consultado sobre el proceso de fabricación, Néstor López explicó que “la bobina original de acero inoxidable se fleca a la medida del desarrollo de caño, esa chapa pasa por una conformadora, la cual hace un preconformado y lo va cerrando hasta que lo suelda, lo enfría, lo endereza, le borra la costura, lo corta y lo apila”.

“Básicamente la máquina hace todo. Quizá queda alguna tarea pendiente como el pulido, que se hace en otra máquina”, agregó.

En relación a la materia prima, López destacó las propiedades del acero inoxidable, al que calificó de “higiénico y anticorrosivo”, por lo que es muy utilizado en los sectores alimenticio y farmacéutico, y a nivel decorativo en reemplazo del cromado.

Sus inicios
Bainox es una empresa joven, producto del esfuerzo de toda una familia que desde hace muchos años va sumando generaciones para darle al emprendimiento el respaldo de un apellido, con todo lo que eso significa.

Con la experiencia adquirida por Valeriano López a lo largo de su vida en lo que respecta a la fabricación de tubos de acero inoxidable y el empuje de su hijo Néstor, Bainox empezó a diseñar y a armar sus propias máquinas para, de a poquito, hacerse de un nombre en el sector.

“Empezamos con mi padre en una época muy difícil como 2001, en la calle Campichuelo y con una máquina conformadora que hacia caños de 9.52 a 19 milímetros, teníamos una gama de cinco o seis medidas -relató Néstor López- ahora tenemos más de cincuenta, entre 2 milímetros de diámetro y 114, en el largo que se requiera”.
Empezaron a sumar clientes y el lugar les quedó chico para responder a todos los trabajos encomendados. Por ese motivo, buscaron nuevos horizontes y se instalaron en la calle Zeballos, pero a los tres años les volvió a quedar chico y volvieron a mudarse. Esta vez, a la calle Nazar, en Gerli.

“Ahí teníamos dos máquinas, pero como nos pedían otras medidas hicimos dos máquinas más y el lugar nos volvió a quedar chico”, expresó Néstor López.

“Luego de una medida del gobierno frenando la importación de tubos, se nos vino una ola de trabajo muy buena. Entonces tuvimos que buscar un galpón más grande, y llegamos a Méndez, donde armamos una quinta máquina y llegamos a trabajar en doble turno”, detalló.

Otro de los elementos que le permitió a Bainox desarrollarse es el clima familiar.
A la semilla plantada por Valeriano y Néstor, se fueron sumando la esposa de éste último, Mónica Fernández, y sus hijos Federico y Gonzalo, como así también Aldo Luciano en Ventas y Agustín Luciano en la Administración.

Bainox está ubicada en la calle Méndez 1245 entre Heredia y Helguera de Wilde, teléfono: 4206-0755, email: info@bainox.com.ar

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