“Reconvertir a Avellaneda para que deje de ser un Sector de Apoyo y un Patio Trasero de la Capital Federal y sea una Ciudad Singular y Complementaria”.

La compleja administración de las grandes urbes exige definir primero los Grandes Temas de la Ciudad. Y esta definición debe surgir del consenso político y comunitario, del cual resulte la implementación de un Plan Estratégico y el consiguiente Plan Urbano Productivo y Ambiental, que defina las cuestiones del espacio público y privado.

Por eso, no se puede tratar el tema Producción – Industria en forma aislada. Forman parte de un gran todo. Analicemos nuestro hoy y propongamos algunos pasos a seguir: 1°.- Definamos un Modelo de Producción e Industria que: -Priorice las Condiciones de Trabajo. – Sea en el tiempo técnica, posible y ambientalmente sustentable y económicamente redituable. – Que aproveche la mano de obra y las potencialidades locales. 2°.- Debemos aprovechar la ventaja diferenciada que tenemos con el resto del conurbano o Area Metropolitana por nuestra ubicación (Accesos, cercanía, puerto, etc.) teniendo en cuenta la complementariedad con el resto del gran Bs.As. y la provincia, logrando una Regionalización Industrial, que busque para nuestra ciudad industrias tendientes a la especialización y a la producción de cadenas de valor. 3°.- Debemos dejar bien en claro que: “Mano de Obra, Industria y Medio Ambiente pueden convivir perfectamente: No existen industrias contaminantes.

Existen industriales que contaminan”: es una especulación económica que con la excusa de la mano de obra y la ocupación se permitan funcionamientos que atentan contra la salud o con la excusa de ésta se coarte la inversión y se trabe la producción industrial. Y por último, debemos armar un Plan de Inversiones con nuevas formas de financiación, gestión y crédito.

Ahora bien, todo esto es imposible si no existe un Estado Municipal Gestionador y Transparente que planifique y aplique políticas en conjunto con las Cámaras que aglutinan a los Industriales.

Realizadas estas definiciones, podemos hablar responsablemente de crear las condiciones para recuperar el Perfil Industrial de Avellaneda, -(frase que se proclama mucho en época de campañas sin tener ideas claras)-, y de proponer un Plan para la Ciudad que genere una fuerte Promoción Industrial, teniendo en cuenta algunos aspectos como:

1º.- La trama urbana de Avellaneda permite la convivencia residencia-fábrica. Pienso que controlada y coordinada esta convivencia es compatible. Es la historia de Avellaneda.

2º.- Desde el municipio se debe facilitar la reactivación y/o creación de industrias a través de la competencia del propio municipio y de gestión ante las autoridades provinciales.

Por competencia propia del municipio algunas acciones pueden ser: Tasa única; Mejoras y mantenimiento de los Accesos; Estricto control del tratamiento de efluentes y contaminación; Ordenamiento del tráfico; Revisión y control de la zonificación del partido; Creación de las condiciones necesarias para el establecimiento de un Parque Industrial: (sin caer en la moda de parque industrial, creo que es una propuesta razonable, pero como resultado de una planificación urbana); Agilización de las Habilitaciones: lograr el cambio de la legislación dado que hoy la habilitación ambiental la hace la provincia y la comercial el municipio; Incentivos Tributarios para las industrias existentes (facilidades de regularización) y para promover nuevas industrias.

Seguiré luchando, -como desde hace muchos años-, porque estoy convencido que una Avellaneda Industrial es posible. Y porque nací y viví en una casa junto a un balancín de la industria de mi padre en Sarandí.